Ricciardo sabe cómo dejar atrás sus problemas en clasificación

Daniel Ricciardo ha sufrido esta temporada como nunca antes en la Fórmula 1. Desde su debut en 2011 con HRT, el piloto australiano ha ofrecido un rendimiento muy consistente y equilibrado, llegando incluso a superar a pilotos de tanto prestigio como Sebastian Vettel o el propio Max Verstappen.

Pero, si bien su rendimiento en las carreras ha seguido siendo tan competitivo como siempre, en clasificación su compañero neerlandés le ha vencido con claridad. “Solían llamarme piloto de sábados, ahora siento que probablemente deberían llamarme piloto de domingos. No diría que me he peleado con el coche, pero me ha costado maximizarlo. Hubo muchas vueltas los sábados me estrellé dos veces en clasificación (Australia y Azerbaiyán), algo muy raro en mí”, reconoce el propio Ricciardo.

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Daniel Ricciardo admite que al principio se esforzó en buscar el límite del coche, pero llegó un momento en el que entendió que era mejor conducir con mayor naturalidad y dejar que el monoplaza hiciera su trabajo. “Por la razón que sea, Max (Verstappen) no lo tuvo tan complicado al inicio de año. Probablemente yo haya sido excesivamente sensible al problema. La mayor parte del tiempo, lo mejor era simplemente conducir y aprovechar el agarre en lugar de intentar encontrar el límite demasiado. Hubo un momento en el que pensamos que el coche era así, no era perfecto y teníamos que vivir con ello”, admitió en declaraciones a Autosport.

Max Verstappen ha vencido en 12 ocasiones a Daniel Ricciardo en clasificación.

A partir de ahí, los resultados fueron mejores, pero también desencadenaron un problema con viejos hábitos que se han revelado inútiles en el coche de esta temporada. “Desde entonces, fueron mejor las cosas, pero nos quedamos estancados con las viejas costumbres. En algunos entrenamientos del viernes fuimos los más rápidos. Anteriormente, cuando eso ocurría, dejábamos el coche tal como estaba, ¿para qué cambiarlo? Pero luego llegaba la clasificación, la pista evolucionaba y todo iba a peor. Nos cogió con la guardia baja, fue un proceso de aprendizaje”.

Cuando llegaba la clasificación, la pista evolucionaba y todo iba a peor. Nos cogió con la guardia baja, fue un proceso de aprendizaje

Daniel Ricciardo confía en que todo lo aprendido este año le sirva para mejorar el año que viene, una temporada crucial en la que además deberá decidir su futuro, pues su contrato con Red Bull termina a finales de 2018. “Ahora sabemos las razones, es por eso que confío en que el año que viene irá mejor”.

Fuente: AutosportFotos: Red Bull Content Pool