Este motor de hidrógeno de AVL revolucionará la combustión con un rendimiento brutal
Los motores de hidrógeno se han convertido en la única salvación posible para evitar la muerte de la combustión tradicional, una tecnología en la que se han embarcado fabricantes y proveedores. Como AVL, una consultora de ingeniería que acaba de presentar un revolucionario propulsor H2 con un rendimiento verdaderamente excepcional.
Toyota fue la primera marca de coches que anunció el desarrollo de un nuevo motor de combustión de hidrógeno. La marca nipona, una de las líderes en la estrategia de electrificación que apuesta seriamente desde hace años por los híbridos y ahora por los eléctricos, es una de las que se niega a renunciar a la combustión tradicional, utilizando su experiencia en el campo del hidrógeno para evitar la desaparición de esta tecnología de propulsión.
Una carrera a la que se han sumado más fabricantes, pero también proveedores del sector de la automoción. En los últimos meses, han sido varias las presentaciones de propulsores preparados para consumir hidrógeno, en lugar de combustibles fósiles o sintéticos. El último en sumarse a esta estrategia ha sido el departamento de competición de la consultora de ingeniería AVL. El equipo de RaceTech ha presentado un sofisticado motor que revolucionará el mundo motorsport, en un primer término, y también el futuro de la industria automotriz.
Un motor de hidrógeno sin turbo y con una potencia sin precedentes
La gran novedad es una combinación de tecnologías para conseguir un rendimiento realmente soberbio, pues se trata del primer motor con cuatro cilindros y 2.0 litros de cilindrada que se alimenta de hidrógeno, y que desarrolla una potencia máxima de 300 kW, nada menos que 408 CV. Su elevado rendimiento supone un verdadero hito, ya que alcanza una relación de potencia y cilindrada de 150 kW por litro. O, lo que es lo mismo, 204 CV por litro.
La división de AVL RaceTech, con sede en Graz, Austria, acumula una dilatada experiencia en el campo del hidrógeno, ya que desarrolló un motor especial en 2013 con un funcionamiento de hidrógeno y gasolina, utilizando al extinto Aston Martin Rapide S como demostrador de esta tecnología participando en las 24 horas de Nürburgring. La firma ha demostrado que es posible ofrecer un rendimiento muy elevado en los motores que funcionan con una mezcla pobre de combustible y que necesitan un alto nivel de aire.
Los motores de gasolina y de combustión de hidrógeno comparten tecnología
El nuevo propulsor, que se espera que esté listo para su puesta de largo en competición a partir de la primavera de 2023, también cuenta con la ayuda de la tecnología de la inyección de agua, pulverizando el líquido elemento sobre los colectores de admisión del motor, lo que aumenta la presión de sobrealimentación. Pero, al mismo tiempo, también han logrado que su evaporación se convierta en un refrigerante en la cámara de combustión. Una tecnología, y un motor, que tienen la capacidad de inaugurar una nueva era en un horizonte temporal nada lejano.