China trató de copiar el ascenso a los cielos de Land Rover, pero le salió muy, muy mal
Allá por 2018 Land Rover lanzaba una campaña en la cual su Range Rover Sport era capaz de subir los 999 escalones para llegar a la Heaven's Gate, el llamado Dragon Challenge, el cual un conocido fabricante chino ha tratado replicar, con resultados menos óptimos.

Cuando Land Rover consiguió uno de sus retos más recientes, el Dragon Challenge, quizás a alguno se le venga a la mente la mítica 'Knockin' on Heaven's Door de Guns N' Roses. Un reto que en China han tratado de replicar, aunque el resultado no ha sido precisamente el que esperaban tener, y más en su propio terreno.
Este Dragon Challenge consistía en un Range Rover Sport recorriendo las 99 curvas del paso que lleva a la montaña Tianmen, también conocida como Heaven's Gate. Allí el desafío consistió en que el Range Rover Sport, con el piloto profesional Ho-Ping Tung escalase nada menos que 999 escalones para llegar hasta el arco que corona la cima, a unos 150 metros de altura y más de 1.500 metros sobre el nivel del mar, cosa que logró hacer pese a que los escalones forman una pendiente de 45 grados.

Si el Range Rover Sport puede, el Fulwin X3L también
Han sido varios los fabricantes chinos los que se han 'fijado muy atentamente' en los diseños europeos para hacer sus propios modelos desde hace tiempo. En esta ocasión ha sido el Grupo Chery quien decidió llevarse las cosas a su terreno y replicar la gesta de Land Rover en Tianmen - que, al fin y al cabo, es uno de los grandes símbolos de su país.
Para ello, Chery llevó hasta la Heaven's Gate su Fulwin X3L, cuyo parecido con el actual Land Rover Defender salta a la vista. En este caso, hablamos de un eléctrico de autonomía extendida, con un motor de combustión 1.5 turboalimentado que alimenta a una batería de LFP de 32,66 kWh. Existen versiones tanto de un motor en el eje trasero como de un motor en cada eje.
Un 4x4 eléctrico de autonomía extendida, así es el Fulwin X3L
Para este reto utilizaron la versión de dos motores con 422 CV de potencia y 505 Nm de par motor, capaz de pasar de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos según cifras oficiales. Cuenta con 9 modos de conducción (incluyendo el llamado 'giro de tanque' o marcha de cangrejo), una altura libre respecto al suelo de 225 mm, ángulo de ataque de 22º y ángulo de salida de 30º. Muy diferente al Fulwin T10, que logró de hecho un récord Guinness nada menos.

Hasta aquí, todo bien, y de hecho el Fulwin X3L comenzó a realizar bastante bien su ascenso, pareciendo que iba a conseguirlo el pasado 12 de noviembre. Ahora bien, cuando estaba en torno al último cuarto de su ascenso, algo se rompió al paso del todoterreno: lo que parece ser una de las cuerdas de seguridad. Esto provocó una desastrosa reacción en cadena.
Reacción en cadena que acabó con la épica subida
La cuerda de seguridad se enganchó en la rueda delantera derecha del Fulwin X3L, lo que provocó a su vez una pérdida de tracción. El 4x4 comenzó a deslizarse hacia abajo y hacia la derecha, golpeando un guardarraíl y rompiendo una de las vallas de la icónica escalera, según detalla la investigación preliminar de Chery. El coche se quedó inerte unas dos horas pues el cable había hecho que se cortase la entrega de potencia.
Chery ha pedido disculpas a través de sus espacios en redes sociales, prometiendo compensar todos los daños producidos. También ha pedido disculpas tanto a los turistas que visitaban la Heaven's Gate (la cual se cerró al público durante el evento) y a todos aquellos que habían acudido hasta Tianmen como público para la escalada que pretendían que pasara a la historia, un nuevo hito de su familia Fulwin que comenzó con 'un toque español'.

¿Habrá segunda toma? Hay debate en China
Está por saber si Chery, tras haber admitido no haber tenido en cuenta todos los riesgos en esta ocasión, volverán a intentar este reto en los próximos meses. Está claro que igualar la gesta de Land Rover y labrarse una reputación off-road con sus propios sistemas (al ser eléctrico de autonomía extendida) es una idea de marketing suculenta para uno de los grupos más grandes del gigante asiático.
Al menos en Tianmen pueden afirmar que no hubo daños importantes a nivel medioambiental ni al enclave histórico más allá de la valla, ni por supuesto daños personales. Lo que sí ha hecho es que en China comience un debate sobre el uso de este tipo de parajes escénicos para estas actividades por cuestiones de seguridad.
Fotos: Car News China
