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Fuelmatics, repostando combustible de forma automática y sin bajarte del coche

Desde hace una década, la empresa sueca Fuelmatics trabaja en sistemas de repostaje automatizados para las gasolineras. Ahora presenta su quinta generación, que es más rápida, se puede pagar desde el móvil y además cuenta con tres boquillas, una para cada tipo de combustible. ¿Será así el futuro de los repostajes?

Fuelmatics, repostando combustible de forma automática y sin bajarte del coche
Llega el repostaje autónomo - Fuelmatics

8 min. lectura

Publicado: 13/06/2020 13:00

Aunque la tecnología automovilística ha mejorado enormemente en las últimas décadas, hay algo que no ha cambiado casi desde la prehistoria de la automoción: los repostajes. Cuando la aguja se acerca peligrosamente a la zona roja (o en su defecto, el indicador digital está bajo mínimos), sabemos que es hora de pasar por la gasolinera.

Ojo, esto no afecta a todos por igual. Muchos youtubers con BMW son capaces de llevar siempre su coche con la aguja casi apoyada en el tope inferior, de forma mágica.

Y repostar siempre ha sido algo tedioso, sobre todo hoy en día, en el que ya es complicado encontrar un profesional que lo haga correctamente y lo tenemos que hacer todo nosotros. Es más, ya no es raro encontrar gasolineras 24 horas que no tienen personal, solo interactuamos con máquinas.

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Varias aplicaciones móviles permiten pagar el combustible sin abrir la cartera ni bajar del coche, pero esto es ir un paso más allá

Hubo una época en la que ibas a tu gasolinera de confianza, charlabas unos minutos con el empleado de la estación (¿os acordáis de la serie «Lleno por favor»?), y seguías tu camino hasta el siguiente repostaje. E incluso te miraban los niveles, la presión de las ruedas o te limpiaban el cristal. Qué tiempos aquellos...

Hoy en día todo se hace de una forma más fría, más autónoma y en el más absoluto silencio. Un «Hola» y a veces, ni eso porque la educación a bajado a la misma velocidad que ha subido la demanda de petróleo. Para postre, el COVID-19 hace todo más aséptico.

Desde el punto de vista de los trabajadores, que cada vez se haya popularizado más el autoservicio en las gasolineras (con el fin de ahorrar costes y, supuestamente, ofrecer un combustible más barato) no fue bueno.

Quizás haya sido el cambio más grande hasta ahora: pasar de que te sirvieran el combustible a tener que hacerlo uno mismo para luego acercarse a la caja y pagar, de «gasolineros» han pasado a cajeros.

Y eso aquí porque en muchos países de Europa, algunas estaciones de servicio están completamente automatizadas y no hay nadie que no piense en unos y ceros con el que intercambiar una sonrisa. Aunque lo bueno de las máquinas es que, si están bien programadas, te dan las gracias.

Pero esto todavía se podría llevar más allá, o al menos eso es lo que lleva intentando la empresa sueca Fuelmatics. Desde hace años han desarrollado un sistema de repostaje autónomo y por el que, gracias a las tecnologías de pago desde el móvil, ya no es necesario ni bajarse del coche. En el vídeo podéis ver cómo funciona:

La forma de operar es muy sencilla. Llegas con tu coche y estacionas el vehículo frente al surtidor. Los sistemas de visión artificial registran la matrícula de tu vehículo, así como su posición. Desde el asiento del conductor, accedes con tu smartphone a la aplicación de Fuelmatics y arrancas el proceso de repostaje seleccionando qué combustible quieres y la cantidad. Hasta aquí, funciona casi como Waylet o CEPSA Pay.

A partir de aquí ya te puedes relajar y permanecer atento a la pantalla, donde te muestra la información de lo que está sucediendo. La máquina se encarga de abrir la tapa del vehículo para acceder a la boca de llenado -hay que abrir la trampilla exterior antes- y, también, de extender una manguera para posteriormente proceder al repostaje.

Una vez finalizado, se retira, cierra la tapa de combustible y tras pagar ya te puedes ir. Obviamente esa máquina solamente sirve para coches actuales que no tienen tapón de combustible, solamente tapa. ¿Funciona con tapas clásicas? No lo sabemos, igual sirve si te bajas y la abres tu manualmente. Pero igual el cerebro electrónico cortocircuita.

Ojo también importa en el lado que tienes la tapa, si te detienes al revés, la habrás liado

¿Cuáles son las ventajas de este sistema? Quizás la más importante es que no se producen ni derrames ni escapes, e incluso los vapores que se generan en el llenado se recogen y vuelven a condensarse, lo cual es bueno para el medio ambiente.

En cuanto la boca de llenado flexible se acopla al depósito, se produce una unión estanca en la que no hay pérdida posible. Incluso podría llenar combustibles en forma de gas o a alta presión como en GNC o el GLP sin ningún problema.

De esta forma, el sistema es más respetuoso con el medio ambiente e infinitamente más seguro. Uno se olvida de tener que coger guantes, mancharse las manos y oler a combustible, derrames sobre los zapatos u olvidos en los que la gente se va con la manguera todavía conectada al depósito (meanwile, in Russia/USA...).

Este modelo de estación de servicio no parece la mejor forma de crear puestos de trabajo

Lo cierto es que parece un plan sin fisuras pero, ya sea por coste o porque el ser humano a veces le cuesta evolucionar, no se ha democratizado tanto como los protagonistas del anterior vídeo quieren dar a entender.

Hoy en día, otra ventaja es que no tienes que bajarte del vehículo y por lo tanto, minimizas las posibilidades de contagio

Además, puede que haya llegado un poco tarde, sobre todo si tenemos en cuenta que la revolución eléctrica parece que ya ha empezado. Pero eso también puede robotizarse... Como los conectores de carga están estandarizados, se puede entrenar a una IA para que reconozca los bornes y encaje el enchufe automáticamente, y al terminar el proceso de carga se haga la operación inversa.

Mira que si ya no va a ser necesario bajarnos del vehículo para repostar combustible y, resulta que ya no hay combustible que repostar...

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