La FIA considera prematuro asegurar que el Halo salvó a Leclerc
- Durante la arrancada del Gran Premio de Bélgica, se produjo un accidente que comprometió la integridad del piloto de Sauber, Charles Leclerc.
- En el Halo del monoplaza del monegasco quedaron marcados los neumáticos del McLaren de Fernando Alonso, que voló por encima tras ser embestido por Hülkenberg.
3 min. lectura
Publicado: 27/08/2018 10:30
El Halo ha llegado a la Fórmula 1 esta temporada y, a pesar de las feroces críticas recibidas desde su aprobación y hasta el inicio de la competición, en pocas carreras ha pasado a ser un elemento más en el que pocos reparan. Pero es en situaciones como las vividas en Spa-Francorchamps el pasado domingo cuando el Halo toma sentido y justifica su introducción en las diversas categorías de monoplazas auspiciadas por la FIA, aunque no quede claro si evitó una tragedia.
En la frenada de La Source, tras apagarse los semáforos que dan inicio a la carrera, Nico Hülkenberg embistió al McLaren de Fernando Alonso, que salió catapultado sobre la zaga del Sauber de Charles Leclerc, volando por encima y aterrizando en la escapatoria totalmente destrozado.
Una suerte parecida sufrió el Halo del Sauber, cuya cubierta de fibra de carbono quedó destrozada, aunque la estructura interior de titanio aguantó el golpe. Muchos han sido los que se han apresurado a afirmar que dicho elemento de seguridad le salvó la vida a Charles Leclerc, pero Charlie Whiting, director de carrera y delegado técnico de la FIA, prefiere ser más cauto. “Sería un poco especulativo, pero no necesita mucha imaginación el pensar que las marcas de los neumáticos podrían haber estado en la cabeza de Charles (Leclerc). Habría sido un milagro si el Halo no hubiera estado allí, había marcas de neumáticos muy extensas”, señaló.
Con miras a mejorar el Halo en el futuro y determinar si cumple su función como se esperaba, la FIA ha iniciado un estudio para evaluar el estado del Halo y la resistencia de los anclajes del mismo al chasis, una cuestión que planteó complicaciones durante el invierno, pues debían resistir el peso equivalente de un autobús de dos pisos para cumplir con los requisitos mínimos fijados por la federación. “Hay una examinación en curso de las piezas, es un poco pronto para decirlo. La cámara de alta velocidad no nos dirá suficiente y la cámara a bordo que hemos visto no es particularmente clara”, comentó Whiting.
Independientemente de si el Halo desvió la trayectoria del McLaren en dirección al casco de Charles Leclerc, los pilotos han expresado su alivio por contar con un elemento que les proteja de situaciones similares, que no por producirse de manera poco habitual, deben considerarse irrelevantes.
Fotos: Sauber F1 Team
