BYD señala al gran perdedor del retraso a los motores de combustión en Europa, y no es China
Políticos y marcas en Europa en su gran mayoría celebran que la UE haya decidido aplazar su objetivo de cero emisiones en el mercado automovilístico a partir del 2035. Mientras tanto, las marcas chinas se frotan las manos.
El 2025 va a terminar muy pronto y una de las noticias más destacadas de todo el año ha sido, sin lugar a dudas, la marcha atrás de la Comisión Europea en sus ambiciosos objetivos de prohibir los motores de combustión en una década.
A partir del 2035, las marcas podrán seguir vendiendo vehículos térmicos, aunque con condiciones que cumplir en forma de estrictas rebajas de emisiones de CO2. Un movimiento que podría parecer una buena noticia para el sector automovilístico, pero que viendo la alegría que ha despertado en China, da que pensar.
BYD tiene claro quiénes son los perdedores
Cada euro que las marcas europeas desvíen al desarrollo de híbridos enchufables, híbridos y motores de combustión es un euro que no van a gastar en coches eléctricos, mientras que en China seguirán adelante con sus planes de apostarlo todo al eléctrico, y a los PHEV/EREV en segunda instancia.
Es la conclusión a la que ha llegado Stella Li, vicepresidenta de Build Your Dreams y responsable de las operaciones de la marca china en Europa. La directiva del principal fabricante de coches enchufables en el mundo, y eléctricos puros ya por delante de Tesla, no ve con malos ojos la decisión de la Comisión Europea.
Y es normal, ya que juega a favor de sus propios intereses. Stella Li considera que la decisión afectará negativamente a los fabricantes europeos y, en contraposición, beneficiará a las marcas chinas. Principalmente por una cuestión de inversiones.
Desde BYD creen, con razón, que al dar una vida extra para que los fabricantes occidentales puedan seguir desarrollando motores de combustión, estos se verán obligados a dividir sus esfuerzos e inversiones en I+D. Mientras tanto, las marcas chinas seguirán invirtiendo (casi) todo hacia los vehículos eléctricos.
«Europa está impulsando y luego retrasando el Pacto Verde, y para muchas empresas automotrices esto afecta al I+D. Su gasto debe dividirse en dos, nunca se tiene suficiente dinero para eso y nunca se domina ningún área. ¿Cómo pueden competir con una empresa (como BYD) que solo cree en una dirección? Durante los últimos casi 30 años, nuestro sueño siempre fue la electrificación. Invertimos todo el dinero en una sola dirección», se reafirma Stella Li.
La jefa de BYD en Europa lo tiene claro: «No nos importan las revisiones ni retrasar la prohibición de los coches de combustión. Podemos usar los híbridos enchufables para sustituir los coches de combustión con un rendimiento mucho mejor, un consumo de combustible mucho menor y tecnología inteligente».
Los “E-Cars” juegan a favor de BYD
Además, la decisión de Europa de crear una nueva categoría M1E para fomentar la producción y venta de coches eléctricos asequibles para el segmento B juega también a favor de BYD. La marca china, que ha entrado también en la categoría de los kei cars en Japón, va a empezar pronto a fabricar coches en Europa.
Una cuestión fundamental para que BYD se ahorre los aranceles a la importación de coches eléctricos al entrar al Viejo Continente, y que abre las puertas de par en par a la fabricación de un coche eléctrico urbano con las condiciones que quiere la UE. A eso se le sumará una mayor presencia en nuestro continente, duplicando sus puntos de venta de cara al año que viene hasta los 2.000 centros.
Fuente: Auto Express