IndyCarLa lluvia obliga a aplazar la comenzada carrera de Barber al lunes

El Gran Premio de Alabama dio comienzo este domingo, pero no se le ha podido poner conclusión. Las intensas lluvias caídas en el circuito de Barber, extendibles a la totalidad del estado, durante toda la jornada han impedido que la carrera llegase siquiera a la mitad de su distancia prevista (90 vueltas) ni de su duración máxima (2 horas), requisitos necesarios para considerar oficial la prueba, por lo que IndyCar ha optado por aplazar la continuación de la prueba al lunes, donde será reanudada a las 18:00 (hora de España).

Motorsport

Newgarden le quita la pole a Power por 13 milésimas

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Con la presencia omnipresente de la lluvia desde el principio del día, la carrera comenzó con unas dificilísimas condiciones de visibilidad y en fila india tras una primera vuelta con bandera amarilla. Desde la pole, Josef Newgarden no padecía los efectos del spray que afectaba a todos sus contrincantes, y puso un margen de cuatro segundos con Will Power en apenas dos vueltas. Por detrás, James Hinchcliffe cayó del quinto al octavo lugar, Alexander Rossi aprovechó los problemas del canadiense y pasó también a Marco Andretti para situarse sexto, y Robert Wickens rebasó por el noveno lugar a un Simon Pagenaud que tuvo muchos problemas de ritmo, siendo acosado por Zach Veach.

Más allá de un Matheus Leist que estuvo cerca de no tomar la salida por un problema eléctrico, el primero en sucumbir a las condiciones fue Andretti, con un trompo en la tercera vuelta. Llegada la undécima vuelta, con la ventaja de Newgarden reducida a un par de segundos, Charlie Kimball, que rodaba en undécimo lugar, fue golpeado por Ed Jones en la penúltima curva, impactando a posteriori con las protecciones. El piloto de Carlin reemprendió la marcha, pero se quedó tirado a mitad de trazado, causando un periodo de caution en el que Pagenaud entró a boxes, además de otros pilotos en la parte trasera.

La carrera se relanzó en la vuelta 17, pero las rachas de viento y el agua estancada hicieron de las suyas. Newgarden estuvo muy cerca de perder el control hasta en dos ocasiones en la recta de meta, pero Power no tuvo tanta fortuna y trompeó en solitario antes de frenar, impactando con el muro de separación de boxes y rompiendo una de las suspensiones. Ryan Hunter-Reay le esquivó por muy poco, y Scott Dixon, en quinta posición, redujo drásticamente, lo que le costó perder cuatro posiciones. Los grandes beneficiados fueron Veach, que aprovechó para adelantar también a Wickens, y Takuma Sato, que hizo lo propio con Jones, antes de que la carrera volviese a neutralizarse.

Después, ya no hubo más competición. Tras 34 minutos, el empeoramiento de las condiciones obligaron a sacar una bandera roja que duró otros 37 minutos, y en la que Zach Claman De Melo reparó daños en su coche, siendo sancionado con dos vueltas por ello. Cuando la prueba se reemprendió con bandera amarilla, la situación no era mucho mejor: Tony Kanaan se quedó tirado en una curva, y Graham Rahal sufrió un trompo a baja velocidad saliendo de otra, lo que convenció a Dirección de Carrera para detener la contienda de nuevo, esta vez en la vuelta 23.

Desde ese momento, la esperanza era que un tramo de tiempo algo más clemente previsto por los servicios meteorológicos atravesase el circuito durante el tiempo suficiente para dar por acabada la prueba el domingo, pero nunca ocurrió. Una hora y 25 minutos después, con la lluvia cayendo con absoluta intensidad, se tiró la toalla. Correr el lunes no implica que se vaya a hacer en seco, toda vez que la previsión de lluvia es del 30% al 50%, pero se espera poder terminar la carrera en su totalidad con estas previsiones, llueva o no. Con un poco de fortuna, Hinchcliffe sí que tendrá ocasión de ir al baño esta vez antes de empezar la carrera...

Orden de carrera en Barber (vuelta 23 de 90)

Fotos: IndyCar Media