Porsche cambia de rumbo mientras las ventas de coches eléctricos se desaceleran, seguirán apostando en lo de toda la vida
Las ventas de coches eléctricos no están terminando de cumplir las expectativas. La falta de matriculaciones obliga a las marcas ha cambiar sus planes. Porsche seguirá apostando por los motores de combustión y por los híbridos.
En Porsche andan ciertamente preocupados, aunque no del todo. La llegada del Taycan en 2020 supuso un antes y un después para los de Stuttgart. Los alemanes, a pesar de su pasado y legado, decidieron apostar por el coche eléctrico cuando la industria preveía un incremento notable en el número de matriculaciones. Y así fue durante los tres años siguientes. Sin embargo, en 2024 ha habido un cambio de rumbo. Porsche pierde ventas eléctricas y ante un panorama más oscuro la compañía ha decidido tomar una decisión drástica, pero controlada.
Como venía diciendo, el Taycan fue un éxito inmediato para Porsche en 2020. Las ventas auguraban un prometedor futuro. En poco tiempo, para ser Porsche, alcanzó las 100.000 unidades producidas y vendidas. A finales del curso pasado, justo antes del lanzamiento de una importante actualización, los alemanes registraron el mejor último trimestre de ventas, 12.744 Taycan vendidos entre octubre y diciembre. Nada hacía presagiar un 2024 complicado, pero vaya si lo está siendo. Las ventas han caído considerablemente, sobre todo en China, el principal mercado eléctrico del mundo.
Más híbridos para ajustarse a las normativas de emisiones europeas
Entre enero y septiembre de este año, el último registro del que se tiene constancia, Porsche ha vendido 14.042 unidades del Taycan a nivel global, lo que significa un 50% menos de ventas. En Stuttgart temen que los malos resultados se extiendan al nuevo Porsche Macan eléctrico, aunque todo tiene solución como ya te contamos; habrá versiones híbridas y de combustión. Ante un más que evidente y negro panorama, Porsche ha decidido seguir apostando por tecnologías conservadoras, principalmente por los motores de gasolina y por los híbridos, híbridos enchufables en el caso de los Cayenne y Panamera. Los únicos que ofrecen dicha posibilidad.
Incluso los 718 Boxster y Cayman van a ser 100% eléctricos a partir del próximo año. El director financiero de Porsche, Lutz Meschke, ha reconocido que la compañía está viendo «una desaceleración en la transición a los vehículos eléctricos». «Muchos clientes, en primer lugar, en el segmento premium y de lujo, están mirando hacia los automóviles con motor de combustión». Como resultado, Porsche planea lanzar una serie de nuevos modelos de gasolina e híbridos. El director financiero de la compañía ha explicado: «también renovaremos nuestros vehículos con motor de combustión, como el Panamera y el Cayenne».
No sabemos exactamente de qué forma Porsche electrificará su gama, pero lo que sí está claro es que los alemanes tienen que acogerse a la nueva normativa que entrará en vigor en Europa a partir del próximo año y que limitará exageradamente las emisiones contaminantes por gama y modelo. El mítico 911 ha abierto la veda a una electrificación parcial, aunque mal llamada hibridación. Si bien podemos considerarlo como un híbrido, no es capaz de moverse de forma 100% eléctrica, ni siquiera en el arranque. La decisión está tomada y hoy por hoy no hay forma de que Porsche se transforme en una marca de coches eléctricos.
Incluso los modelos que a priori iban a montar mecánicas exclusivamente eléctricas podrían montar sistemas mecánicos tradicionales. Curiosamente, las ventas de la serie 718 se ha incrementado significativamente en los últimos meses. Los últimos meses justo antes de volverse eléctricos. Mientras tanto, Porsche sigue trabajando en el hermano mayor del Cayenne que también será eléctrico. En este caso sí es posible la hibridación mediante sistemas enchufables. También deberíamos conocerlo el año que viene. Un año que se presenta determinante para los intereses eléctricos de muchas marcas y de Europa.