La salida de los LMP2 del WEC puede significar un 'renacer' técnico de la categoría
FIA y ACO tienen previsto liberalizar las prestaciones de los LMP2 en las European Le Mans Series (ELMS) en 2024 tras la salida forzosa de estos prototipos del Mundial de Resistencia.
La categoría LMP2 ha sido la particular tabla de salvación del WEC, siempre al servicio de los requerimientos del campeonato. Que los LMP1 escaseaban en parrilla, ahí emergía la figura de estos prototipos para ofrecer espectáculo. Que había que hacer hueco a los nuevos hypercar y estratificar su rendimiento, ahí estaban los LMP2 para llevarse el golpe. Por el camino, la clase de plata ha sido vivero de pilotos y equipos que han dado el salto a la clase reina.
En su último acto de servicio, los LMP2 quedarán relegado del Mundial -no de Le Mans- para dejar hueco a los nuevos prototipos hypercar que debutarán en 2024 y a los vehículos de la nueva clase LMGT3. Aunque la ausencia de los LMP2 es una mala noticia, tal y como han expresado pilotos y equipos, al menos tiene una cosa positiva. Los LMP2 podrán volver a competir en plenitud de prestaciones ahora que no forman parte del WEC.
Los LMP2 sin restricciones ofrecen más de 600 CV de potencia para un prototipo que apenas pesa 930 kilos
Tal y como hemos enumerado, los LMP2 han competido con un rendimiento reducido para lograr una estratificación del nivel de competitividad de los prototipos presentes en el WEC. Así lleva siendo desde 2020, pero su salida del Mundial implica que se puede dar rienda suelta de nuevo a todo su potencial en las European Le Mans Series (ELMS) y las Asian Le Mans Series (ASLM), donde los LMP2 protagonizan la categoría reina.
Los LMP2 volverán a sus antiguos parámetros de potencia y rendimiento en las ELMS en 2024, o lo que es lo mismo, con las prestaciones de las que podían presumir entre 2017 y 2020. Esto significa que los LMP2 volverán a ofrecer más de 600 CV de potencia para un prototipo que apenas pesa 930 kilogramos. Esto no sea así en IMSA al compartir parrilla con los prototipos LMDh de la clase GTP, pero FIA y ACO tienen este plan para sus certámenes regionales.
Un aliciente
Como es lógico, en las 24 Horas de Le Mans se aplicará las restricciones de rendimiento que se han venido utilizando. Con todo, el hecho de poder competir liberalizados tanto en las ELMS como en las ALMS sin duda es un aliciente para que los pilotos y equipos sigan apostando por este tipo de prototipos, incluso si ya no son una manera económica de acceder al Mundial.
Para los aficionados también será una cuestión interesante, sobre todo si hay algún escenario común en los calendarios del WEC y las ELMS en 2024. No sería extraño ver, si se llega a ese punto, que los prototipos LMP2 consiguen velocidades puntas más altas y tiempos por vuelta similares a los hypercar. Las posibilidades de que esto pase son en Spa y en Imola, dos únicos circuitos europeos en los que compite el WEC junto a Le Mans.
Las limitaciones en IMSA
Los prototipos LMP2 en el IMSA corren con una limitación en el límite de vueltas del motor que sirve para regular su velocidad. En concreto, los motores de los LMP2 ruedan a 8.000 revoluciones por minuto en todas las marchas, salvo en sexta, donde el motor se estira hasta las 8.500 revoluciones. Además, tienen un peso de 950 kilogramos con el fin de estratificar el rendimiento respecto a los GTP y, anteriormente, sobre los DPi.
Cifras a tener en cuenta porque los LMP2 que serán protagonistas en las European Le Mans Series a partir de 2024 pasarán de los 950 kilos con los que han competido en el WEC a los 930 kilogramos originales, mientras que su potencia subirá de los 550 CV que tienen ahora a una cifra superior a los 600 CV.
Fotos: FIA WEC / IMSA