Tesla se queda fuera de la flota de alquiler de coches eléctricos de Sixt, BYD asume el rol principal por las malas formas de Elon Musk
Una de las grandes herramientas para fomentar los coches eléctricos son las empresas de alquiler, un mercado en el que Tesla también ha metido la cabeza pero que, en el caso del gigante Sixt, se la han cortado. Las estrictas manías de los de Elon Musk han tenido mucho que ver, un camino mucho más fácil que le ha puesto BYD.
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Publicado: 04/12/2023 20:00
Tesla no solo ha logrado que un elevado porcentaje de los clientes en coches eléctricos compren sus modelos y no los de otras marcas europeas más arraigadas en el continente, aunque con matices. El todopoderoso Model 3 es la opción más demandada junto al Model Y, todo lo contrario que los modelos más lujosos que los clientes descartan en favor de las alemanas.
La marca de Elon Musk, que lidera el mercado europeo y que está tratando de recomponerse tras los últimos sustos para terminar el año con número más cercanos a sus previsiones, se ha encontrado de la noche a la mañana con otro problema. Y este no es de los que tengan solución a corto, ni a medio ni a largo plazo. Sixt, una de las mayores empresas de alquiler de coche y que ha apostado seriamente por los coches eléctricos, ha comunicado a sus clientes que dejará de ofrecer en poco tiempo los modelos de Tesla, concurriendo una serie de factores y algunos más que importantes.
Tesla debería de revisar sus estrategias, de particulares y empresas
La empresa ha señalado que «Nos gustaría informarles que actualmente no compraremos más vehículos de Tesla. Además, actualmente estamos reduciendo nuestro inventario de vehículos de esta marca en nuestra flota de vehículos de alquiler». Los gerentes de Sixt han apuntado que la demanda de los modelos de cero emisiones todavía está muy por debajo de los coches de combustión, eso es una realidad, pero también ha destacado el hecho de que los costes de reparación son mayores, al mismo tiempo que el valor residual es menor.
Si bien es cierto que al disponer de menos componentes, los eléctricos tienden a averiarse menos, solo el hecho de tener que sustituir la batería aumenta el coste de reparación en un tercio comparado con los coches tradicionales, y dado que el coche eléctrico cambia de manos constantemente y el estilo de conducción no es uniforme, el riesgo de avería es mayor. Hasta ahora, argumentos sólidos perfectamente comprensibles, pero ahora es donde entran también las manías de Elon Musk y sus estrategias.
BYD vuelve a pasar por encima de Tesla, que empieza a perder poder
Sixt, que cuenta con unas cinco mil unidades de Tesla en todo el mundo, ha visto cómo los descuentos del fabricante californiano para vender más unidades rebaja el valor residual, al igual que el fabricante sube los precios cuando le viene en gana. Uno de los grandes males, pero no el que más. El peor es que la gran mayoría de marcas tienen acuerdos de recompra de los coches y eso con Tesla no existe. Los asiáticos de BYD son mucho más flexibles y no han tenido problema para alcanzar un acuerdo a largo plazo. El primero que estará disponible es el BYD Attoo 3, y se sumarán otros en unos meses.
