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El peor dato del último medio siglo: las ventas globales de coches caen un 43% en abril de 2020

Estamos ante la peor variación mensual en el último medio siglo. Las ventas globales de coches nuevos han registrado un fuerte descenso del 43% durante el pasado mes de abril de 2020. ¿Ha tocado fondo la industria automotriz? ¿O lo peor está por llegar? Analizamos cómo han ido las matriculaciones globales en el cuarto mes de este ejercicio y qué puede suceder a corto plazo.

El peor dato del último medio siglo: las ventas globales de coches caen un 43% en abril de 2020
Las matriculaciones globales de coches nuevos han caído un 43% en abril de 2020.

5 min. lectura

Publicado: 09/06/2020 18:00

La industria automotriz es una de las principales víctimas de la pandemia generada por el coronavirus COVID-19. Como era de esperar, las ventas globales de coches cayeron masivamente durante el pasado mes de abril de 2020. En total se vendieron 4.1 millones de vehículos, es decir, un 43% menos respecto al mismo mes del año anterior, o 3.1 millones de unidades menos comparado con el total vendido en abril de 2019. Las múltiples cuarentenas alrededor del mundo, el pánico entre los consumidores y el alza en las tasas de paro, contribuyeron a generar la peor variación mensual en los últimos 50 años. Y lo peor esta por comenzar.

China, el único punto positivo

De acuerdo con información recolectada de 94 países y estimaciones para unos 100, las ventas de vehículos de pasajeros y comerciales registraron caídas de doble dígito en 9 de las 10 regiones del mundo. China fue la única región en crecer, pues esta nación comenzó a salir del túnel antes que el resto del mundo.

Ventas globales de coches en abril de 2020
Ventas globales de coches nuevos durante el mes de abril de 2020.

Las ventas de la región china (que incluyen también a Taiwán y Hong Kong) totalizaron 2.1 millones de unidades, o un 4% más que en abril de 2019. Su crecimiento contribuyó al hecho impresionante de que sus ventas equivalieron al 51% del total global. De acuerdo con diversas fuentes, la demanda se incrementó durante los primeros días posteriores al fin de la cuarentena, más que todo por el cierre de ventas que se habían iniciado antes de la crisis. Además, en algunas provincias se pudo observar más tráfico en los concesionarios por clientes que buscaban solución a su transporte.

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Las señales iniciales de recuperación en China (todo parece indicar que las ventas en mayo cayeron nuevamente), contrastan con la dramática situación en los otros dos grandes mercados, Estados Unidos-Canadá, y Europa-Turquía. Las matriculaciones en este último se desplomaron un 76% para cerrar en 373.000 unidades, como consecuencia de confinamientos muy estrictos en algunos mercados clave como Italia, España, Reino Unido y Francia. La única variable positiva en Europa tuvo que ver con las matriculaciones de coches electrificados.

Fue tanto lo que la pandemia convulsionó a la industria global, que Europa fue sobrepasada por Japón-Corea en términos de ventas. Estos dos países han sabido manejar la crisis de una manera tal que sus poblaciones no se han visto tan limitadas en su movilidad. Las ventas cayeron “solo” el 18% cerrando en 435.000 unidades.

Ventas globales de coches hasta abril de 2020
Así han sido las ventas globales de coches entre los meses de enero y abril de 2020.

Solo 21,3 millones de vehículos vendidos hasta abril

Las ventas durante los primeros cuatro meses de 2020 totalizaron 21,3 millones de unidades, o sea un 28% menos que entre enero y abril de 2019. Mientras que la situación registró leves mejoras en algunos países en mayo, la industria requerirá de mucho tiempo para estar completamente recuperada (si es el caso). Se espera que las fuertes caídas se moderen en los próximos meses, aunque esto no significa que veremos crecimiento.

Las ventas totales de vehículos deberían cerrar en 70 millones de unidades para este año. Ello representa una caída del 22% comparado con los 90.2 millones de vehículos vendidos el año pasado. A pesar de las agresivas campañas comerciales y más incentivos por parte de los gobiernos, las altas tasas de paro y la incertidumbre prevalecerán durante los próximos meses. Esto afectará la demanda. De hecho, los pronósticos de ventas resultan aterradores sobre todo cuando se comparan con la capacidad instalada de producción actual, en torno a los 131 millones de unidades.

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