Primera toma de contacto con el Isuzu D-Max, uno de las pick-ups japonesas de referencia
La marca japonesa Isuzu ha renovado su modelo pick-up, la D-Max, que sigue siendo una de las opciones más capaces y económicas del mercado en su segmento. Estas han sido nuestras primeras impresiones tras probarla en carretera y en exigentes tramos off road.
El mercado de las pick-ups en España es muy reducido, reconozcámoslo. En otros países como Estados Unidos, Tailandia, países nórdicos e incluso en nuestra vecina Francia son mucho más habituales. Debido a eso, la oferta de modelos en nuestro país también es más reducida.
Quizás te suenen algunos de los más populares, como la Toyota Hilux, la Ford Ranger o la VW Amarok. Sin embargo, es justo decir que la marca japonesa Isuzu lleva muchos años en nuestro mercado ofreciendo su propio modelo. El D-Max es su modelo abanderado en el segmento pick-up, con mecánica diésel, tracción 4x4 y reductora, y se acaba de actualizar.
Antes de hablaros del coche en cuestión, creo que merece la pena hacer una breve introducción de la marca, que lleva muchos años en Europa con sus camiones y sus pick-ups, ofreciendo al público profesional (mayormente) opciones robustas y económicas.
Isuzu y Midi Spain Automoción
La marca Isuzu, presente en más de 150 países y con 87 años de vida, no vende directamente en España, sino que lo hace a través del distribuidor exclusivo MIDI SPAIN AUTOMOCIÓN desde el año 2010.
MIDI, con sede en Italia, es a su vez distribuidor oficial de Isuzu en 15 países europeo desde hace 30 años. Pero no solo eso, sino que MIDI también ensambla en su planta de Verona, al norte de Italia, para todos los camiones Isuzu que van a parar a las carreteras europeas.
Su historia con las pick-ups arrancó en 1961 con el Isuzu Elfin. Luego llegó el Faster, la primera pick-up global gracias a su acuerdo con General Motors, y ya en 2002 aterrizó el D-Max. Este último sigue presente en nuestro mercado tras varias modificaciones: su última generación data del 2020 y ahora le ha llegado el turno de actualizarse. Conozcámoslo.
Así es el Isuzu D-Max
El Isuzu D-Max es un modelo grande y de aspecto poderoso: mide 5,26 metros de largo, 1,83 metros de ancho y 1,79 metros de alto, con una larga distancia entre ejes de 3,21 metros. Si lo comparamos con el modelo anterior, los cambios estéticos son relativamente pequeños.
Lo más importante está en la gama, que se ha simplificado para el mercado español. Principalmente para poder cumplir con las normativas europeas de seguridad y de emisiones: por ejemplo, desaparece una de las tres carrocerías disponibles, la simple, la única que contaba con dos puertas, así como algunas de las terminaciones de equipamiento.
Ahora, el Isuzu D-Max está disponible en carrocería 'Space', con dos pequeñas puertas laterales con apertura suicida para acceder a la parte trasera, donde hay dos pequeñas banquetas de tamaño reducido; y en carrocería 'Crew' de cabina doble, con dos puertas en condiciones y un caja trasera ligeramente más pequeña que la anterior.
Hay ahora cuatro acabados: B, BB+, F+ y Nitro, siempre con tracción 4x4, siempre con cambio automático de convertidor de par y 6 marchas, y con la misma variante mecánica llamada N60. Tiene bajo el capó un motor diésel de cuatro cilindros y 1,9 litros de 164 CV, el mismo bloque que la marca utiliza en algunos de sus camiones.
Y hablando de camiones, el Isuzu D-Max está asentado sobre la misma plataforma que algunos de estos que forman parte del catálogo de la marca, con chasis del largueros y suspensión trasera por ballestas, lo que le aporta una robustez y una flexibilidad envidiables.
El aspecto exterior recibe ligeros cambios: ahora su diseño es más agresivo que antes, con nuevos faros, capó, paragolpes, molduras, la tapa de la caja… En el interior hay una pantalla más grande de hasta 9 pulgadas (la otra es de 8 pulgadas), acompañada de una instrumentación semidigital de 7,2 pulgadas, y de las últimas novedades en el apartado de asistentes a la conducción.
A nivel dinámico, hay una novedad importante: el llamado 'Rough Terrain Mode System', que cuenta con un botón específico en la consola central, es un sistema que actúa sobre la electrónica del vehículo para optimizar el control de tracción en superficies irregulares, de forma que aumenta el par en las ruedas que tienen más adherencia.
Al volante del Isuzu D-Max
Nuestra primera toma de contacto con la pick-up japonesa tuvo lugar en dos trayectos bien diferenciados: uno de carretera, tanto por autovía como por carretera convencional y urbana, y otra en la que pudimos completar un largo y exigente tramo de montaña, con caminos de todo tipo, cuestas, tramos embarrados, llenos de piedras…
Lo que mejor califica al Isuzu D-Max, sin duda, es su robustez. Fuera del asfalto se mueve como pez en el agua, incluso en situaciones en las que predomina el eje trasero (2H). Hay, no obstante, diferentes botones para bloquear la tracción 4x4 (4H) y el diferencial, y cómo no la reductora (4L).
El Isuzu D-Max es capaz de afrontar los caminos más difíciles, aunque bien es cierto que el motor se nota algo justo de fuerza. No obstante, sus 360 Nm de par motor no te dejan tirado en las subidas más complicadas, donde la reductora funciona a las mil maravillas.
No es de las pick-ups más avanzadas tecnológicamente, ni la más elegante ni llena de asistentes en el interior, o de acabados brillantes, pero cumple perfectamente con su cometido y sus precios lo convierten en una opción muy seria para los profesionales que necesitan una herramienta de trabajo sobre ruedas.
En carretera abierta el Isuzu D-Max peca de sus propias características: su elevado peso (2.130 kg), su gran tamaño y su alto centro de gravedad (220 mm de altura libre al suelo), lo que le hacen un poco más perezoso en los tramos más revirados y que nos dejaron unos consumos medios cercanos a los 9 litros a los 100 km.
Sin embargo, su puesta a punto confiere un tacto muy agradable y cómodo, favorecido también por unos asientos realmente cómodos, incluso durante la conducción off road.
Precios del Isuzu D-Max
Hablemos de precios, que son un elemento destacado del Isuzu D-Max. Hay 8 variantes, articuladas en las dos carrocerías antes comentadas y los cuatro niveles de equipamiento.
Los precios de las versiones Space oscilan entre los 34.200 y los 42.300 euros, mientras que con la carrocería Crew de cabina doble van desde los 35.700 hasta los 43.800 euros. Apenas hay extras: tan solo la pintura metalizada, de 570 euros, y el color 'Dolomite White Pearl' por 680 euros. A esto hay que sumarle también los 820 euros del transporte.