Motor.es

Opinión#BelieveInMcLaren... Honda

El popular hashtag de Twitter que una aficionada de McLaren creó en 2011 y el equipo utilizó posteriormente para escenificar su regreso a la élite ha terminado siendo, a raíz de la llegada de Honda, objeto de burla y desahogo de muchos de los seguidores del equipo de Woking a lo largo y ancho de la mencionada red social. Pero, desde hace algunas semanas, la percepción está cambiando y empieza a haber indicios que, efectivamente, invitan a creer en McLaren... y también en Honda.

6 min. lectura

Publicado: 05/10/2016 19:30

En el mes de abril, después de tres carreras y un único punto conseguido en Bahrein por Stoffel Vandoorne, escribí en esta fantástica casa del automóvil que es motor.es el conformismo que consideraba se había instaurado en McLaren-Honda. En su discurso, tanto unos como otros se limitaban a congratularse por terminar carreras, sin mayor aspiración que esa. Daba la sensación de que, ni McLaren tenía suficiente capacidad para diseñar un monoplaza realmente rápido, ni Honda sabía qué hacer para controlar la fiabilidad mientras mejoraba el rendimiento puro del motor.

Han pasado seis meses de aquello y, tengo que reconocerlo, la realidad me ha puesto en mi sitio. Ha quedado claro que Yusuke Hasegawa sabía lo que hacía y que Honda ha hecho los deberes. Se dieron cuenta de que, para avanzar, era necesario arriesgar a la hora de introducir evoluciones, incluso si eso implicaba el coste de la crítica pública como consecuencia de la falta de fiabilidad.

Calcula ahora el precio de tu seguro de coche

¡Infórmate!

"Honda ya permite a McLaren 'desbloquear' todo su potencial"

El motor no es, todavía, tan competitivo como el Mercedes o el Ferrari -ni siquiera como el Renault-, pero si lo suficiente poderoso como para no obligar a Fernando Alonso y Jenson Button a correr en circuitos como Spa-Francorchamps o Malasia como si se tratara de circuitos de mínima carga aerodinámica como Monza. O, dicho de otro modo, ellos ya han superado la fase en la que, desgraciadamente, se encuentra Carlos Sainz con el Toro Rosso y su obsoleto motor Ferrari de 2015. Una fase en la que las fortalezas del chasis y la aerodinámica no pueden compensar las debilidades del propulsor.

Honda ha conseguido varias cosas. Por un lado, sacudirse esa presión asfixiante que amenazaba con hundir el proyecto definitivamente. También ha conseguido situarse en disposición de poder afrontar 2017 con opciones de, al menos, resistir la comparación con sus rivales. Y, quizá lo más importante, le permite a McLaren ‘desbloquear’ todo su potencial.

Eric Boullier lo explicaba a finales de julio: a medida que el motor gana potencia, se pueden ir implementando nuevas piezas en el chasis que proporcionan más carga aerodinámica. Es relativamente habitual que, cuando se genera más carga aerodinámica, también se genere más drag (aunque no necesariamente en la misma proporción). Es uno de los problemas que se ha encontrado Toro Rosso con su evolución estrenada en Hockenheim y que les impide encontrar equilibrio en circuitos de media carga como Sepang.

La eficiencia aerodinámica es la importante en el 90% de los circuitos del mundial y sin un propulsor que acompañe a un chasis bien concebido, resulta muy complicado sobrevivir en la primera mitad de la parrilla. En ese punto está McLaren: empezando a tener suficientes herramientas como para poder, no ya defenderse de, sino también atacar a equipos como Williams y Force India si se dan las circunstancias adecuadas.

"McLaren empieza a tener herramientas para atacar, no sólo defenderse"

McLaren y Honda han solucionado muchos problemas juntos este año y han conseguido llegar a un punto en el que poder afrontar 2017 con esperanzas realistas, palpables. Obviamente, no están -ni mucho menos- a un nivel suficiente como para dar por hecho que van a poder retar a Mercedes, pero sí en disposición de pensar que es posible. 2017 supone empezar de cero a nivel de chasis y aerodinámica. O, lo que es lo mismo, los equipos que están demostrando ser fiables en su evolución y que certifican carrera a carrera que todo lo que se implementa en el coche funciona como estaba previsto, pueden mirar 2017 con optimismo. Un año en el que será tan importante acertar con el diseño inicial como saber mejorarlo durante la temporada, pues será la de mayor margen de mejora en muchos años. Un año, además, en el que es factible dar un salto tan grande como el que McLaren necesita al romper por completo con el actual concepto ya sobradamente estudiado por todos los equipos.

Tanto McLaren como Honda han demostrado que, efectivamente, es posible creer en ellos. En ambos. Y, a diferencia de lo que muchos pensábamos, lo han hecho siendo valientes y arriesgándose a cometer errores en la pista por el bien del proyecto futuro. Personalmente, estoy encantado de haberme equivocado.

Fotos: Pirelli | McLaren

Compártela en:

Pixel