
Foto: Daimler Media
La unidad de potencia del Mercedes de Lewis Hamilton sufrió un fallo en el MGU-H (el sistema de recuperación de energía) durante la primera fase de la clasificación para el Gran Premio de China que le relegó a la última plaza de la parrilla. La escudería alemana decidió entonces enviarla de vuelta a su base para comprobar los daños y evaluar su uso futuro. Concluidos los trabajos, Mercedes ha revelado que los daños no fueron graves y el motor, el primero de los cinco que tiene a su disposición el británico, podrá volver a utilizarse.
“La unidad de potencia llegó a la fábrica el jueves siguiente a la carrera y la investigación ha sido minuciosa; la unidad MGU-H fue desmontada y se sospecha que el problema tuvo que ver con el aislamiento. El turbocargador será sustituido, además de las bombas de aceite, pues se hallaron restos en el sistema; las reparaciones han concluido y la unidad seguirá en la reserva del piloto y viajará a Sochi como recambio”, reza el comunicado de Mercedes.
Por su parte, Lewis Hamilton ha asegurado que su complicado inicio de la temporada -tras el que se encuentra a 36 puntos de su compañero, Nico Rosberg, en la clasificación general- no le ha desanimado. “Como se puede imaginar, muchas cosas me pasaban por la cabeza después de China pero, después de todos estos años, la experiencia me dice que debo mantener la calma y seguir adelante: pueden pasar muchas cosas en las próximas 18 carreras y tengo la máxima confianza en este equipo. Sé que juntos podremos recuperarnos y estoy seguro de que llegarán mejores fines de semana”.
Fotos: Daimler Media