Verstappen y Pérez descartan una futura Indy 500: «No necesito arriesgar mi vida ahí»
- Los ganadores de los dos últimos Grandes Premios de Mónaco no se muestran interesados en perseguir la Triple Corona en el futuro.
- Verstappen asegura que la posibilidad de lesionarse es algo que no le merece la pena, y Pérez planea un futuro familiar fuera de la F1.
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Publicado: 30/05/2022 18:30
La habitual coincidencia de cada temporada entre el Gran Premio de Mónaco y las 500 millas de Indianápolis suele deparar la no menos habitual ronda de declaraciones y comparaciones a ambos lados del charco. Conversaciones, opiniones, enfoques, críticas y alabanzas a los aspectos positivos, negativos, competitivos y filosóficos que engloban Fórmula 1 e IndyCar, curiosamente en dos carreras tan diferentes respecto a lo que los pilotos enfrentan el resto del año en sus respectivas disciplinas.
No ha pasado desapercibido el influjo de pilotos europeos en dirección Estados Unidos en los últimos 5-10 años, el cual ha materializado al fin su primer gran logro la noche del domingo con la victoria de Marcus Ericsson en la Indy 500. El sueco fue uno de los pilotos del Mundial que optó por prolongar su carrera en monoplazas al volante del Dallara IR18, y las aventuras de Fernando Alonso son lo suficientemente recientes como para que los grandes nombres reciban con asiduidad la pregunta: ¿correrías alguna vez las 500 millas?
Esa pregunta suele ir aparejada al concepto de la Triple Corona, incluyendo la eventual disputa de las 24 horas de Le Mans. Por lo pronto, el propio Alonso manifestó en semanas recientes un interés reducido en repetir sus aventuras de 2017-20, y dos de los grandes nombres del Mundial de Fórmula 1 han optado por borrarse públicamente de cualquier especulación futura en las Américas. Al responder a la manida pregunta tras terminar la cita de Mónaco, tanto Max Verstappen como Sergio Pérez han descartado que una participación en la Indy 500 esté en sus planes de futuro.
La negativa ha contado además con interesantes alegatos en el caso de Verstappen, que añade a su máxima concentración en la Fórmula 1 la cuestión del riesgo de lesiones a casi 400 kilómetros por hora: «No deseo perseguir la Triple Corona. Al menos, no la Indy. Aprecio lo que hacen esos pilotos, es una locura... Tengo mucho respeto por lo que consiguen ahí, pero yo, habiendo estado en Fórmula 1 desde hace un largo tiempo, no necesito arriesgar mi vida ahí y potencialmente lesionarme, en las piernas o lo que sea. Ya no merece la pena, digámoslo así».
Siendo un asiduo a las competiciones online de resistencia, Verstappen sí ha manifestado un interés en la famosa carrera francesa de 24 horas, pero no a costa de la Fórmula 1: «Quizá haga Le Mans. Me gustan las carreras de resistencia, así que puede que haga alguna, espero que pronto. Pero para mi, en realidad no importa. Por supuesto, yo intento ser bueno en Fórmula 1, y en cualquier cosa que hago, pero ese deseo de la Triple Corona o lo que sea... no me interesa».
En la misma línea se manifestó Pérez, siendo incluso más exclusivo el mexicano en sus declaraciones pese a que su casi salida de la Fórmula 1 a finales de 2020 vino aparejada de múltiples rumores sobre su siguiente destino. Al parecer, el orden personal de prioridades del mexicano ha cambiado lo suficiente para ello: «No tengo interés, para ser honestos. Y en la resistencia, no sé si lo haré algún día. No creo. Pienso que, en cuanto haya terminado con la Fórmula 1, tendré que mirar hacia atrás y cuidar de mis hijos. Ya tengo tres, ¡así que estaré bastante ocupado!».
Indianápolis arrastra el perpetuo estigma de las carreras en óvalo, derivado de la muerte de Dan Wheldon en 2011 y de la fortuita de Justin Wilson en 2015, así como del terrible accidente que fracturó la médula espinal de Robert Wickens en 2018. Nada de eso ocurrió en Indianápolis, donde la etiqueta de pilotaje y el respeto mutuo ha reducido mucho la incidencia de accidentes graves pese a las altísimas velocidades. Ningún piloto ha perdido la vida en el evento desde 1996, ninguno ha fallecido en el óvalo desde 2003, y la última lesión seria data del accidente que fracturó la pelvis de Sébastien Bourdais en 2017.
Eso sí, la racha positiva pudo haber terminado en 2015 si la acción del equipo médico no hubiese evitado que James Hinchcliffe muriese desangrado tras ser atravesado por un brazo de su suspensión. Aún con todo, los años cambian mucho las cosas y la opinión de la gente; bien lo saben Romain Grosjean y Jimmie Johnson, antiguos críticos de las carreras ovales en monoplazas que ayer disputaron su primera Indy 500, sufriendo sendos accidentes. O por poner el ejemplo contrario, Kevin Magnussen renegando de un regreso a la Fórmula 1 hasta que probar las aguas de la resistencia americana en 2021 le reabrió el apetito mundialista. You never know...
Fotos: Red Bull Content Pool
