Brabham y Goodyear unen fuerzas con el WEC de transfondo

La aspiración de Brabham Automotive de competir en las 24 Horas de Le Mans ha dejado de ser un sueño, toda vez que la firma británica ha dado los primeros pasos para plantearse de una forma seria su desembarco en el WEC. El proyecto todavía está en una fase inicial, pero poco a poco se están poniendo sus cimientos. De hecho, Brabham y Goodyear han llegado a un acuerdo de colaboración para que el fabricante de neumáticos 'calce' al Brabham BT62 en su camino hacia el WEC. El debut del BT62 con las gomas del fabricante de Ohio tendrá lugar en Brands Hatch entre los días 9 y 10 de noviembre.

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Presentado el año pasado, el Brabham BT62 equipa un motor V8 de 5.4 litros. Con un peso de 972 kilogramos, el BT62 no está tan lejos de ser un GTE y los cambios para adaptar el coche a esta normativa no son demasiado complejos. Por este motivo, la puerta de entrada al campeonato de Brabham debería estar en torno a la categoría LMGTE-Pro, si bien no se puede descartar ninguna vía. En este aspecto, Brabham también ha dado un paso adelante para cumplir con los requisitos de producción para competir en el WEC y la fabricación programada del BT62 alcanza ya las 70 unidades.

Por las prestaciones que ha demostrado el Brabham BT62, por encima de las que tiene un GTE o un GT3 si rueda sin limitaciones, se abre otra vía. Y es que el BT62 bien puede ser la base de un hypercar, algo que no afectaría al plan inicial de competir en las 24 Horas de Le Mans de 2022, o lo que es lo mismo, tomar parte de la temporada 2021-22 del WEC. El propio director comercial de Brabham, Dan Marks, ha explicado que están abiertos a ambas posibilidades, en gran medida porque el Brabham BT62 se acerca más por esencia y enfoque a la normativa hypercar.