Las marcas llevan años ocultando un dato clave de los PHEV… que te interesa, y Europa mira hacia otro lado
¿Estás pensando en comprar un híbrido enchufable de ocasión? Cuidado, porque una gran mayoría de fabricantes ocultan un detalle fundamental para conocer el estado en el que se encuentra el PHEV en cuestión. Solo unos pocos, muy pocos, se salvan y de lo que depende también el gasto en mantenimiento.

Los híbridos enchufables no son precisamente del gusto de Europa, pero van cogiendo cada vez más aire frente a los coches eléctricos. Esta tecnología se ha convertido ahora en el puente a la electrificación total, creciendo la oferta considerablemente en una gran mayoría de marcas y ofreciendo a los clientes autonomías, en modo eléctrico, cada vez más cerca de los 200 kilómetros.
A pesar de la persecución que sufren los PHEV desde Bruselas, lo interesante de esta tecnología es que quienes planifican sus viajes de forma inteligente, y cargan la batería con frecuencia, pueden conducir durante meses sin que el motor de combustión entre en funcionamiento. Al menos, hasta que un día avise en el cuadro de instrumentos de que necesita repostar pero, a cambio, habrá realizado un buen número de kilómetros en modo eléctrico.

Las marcas siguen sin ser transparentes con los PHEV
Y este es el problema para los clientes, tanto para los propietarios como para los interesados en comprar un PHEV de segunda mano. Porque muy pocas marcas ofrecen tanta transparencia al informar sobre el kilometraje acumulado por el motor eléctrico y el de combustión. La gran mayoría de los coches híbridos enchufables solo muestran el acumulado total, por lo que casi que es imposible conocer el estado en el que se encuentra cada motor, especialmente de cara al mantenimiento.
Europa no ha reparado en esto, y en sus ataques a esta tecnología, nunca ha obligado a las marcas a ofrecer esta información en el cuadro de instrumentos. Si en los coches de combustión se sabe cuántos kilómetros acumula el motor térmico, en los que tienen dos sistemas de propulsión se debería de saber también cuántos kilómetros ha recorrido el coche en modo totalmente eléctrico o con el motor de combustión activado.
¿Qué dicen los fabricantes acerca de esta cuestión? Pues la división de Hyundai en Países Bajos admite «No se registra el kilometraje por separado para los motores eléctricos y de combustión», por lo que tanto el Tucson híbrido como el enchufable tienen los mismos intervalos de mantenimiento, y no debería. Los de Ford, en el mismo país, también se han mojado y confirmado que tampoco muestran el kilometraje total de cada motor, pero sí el consumo eléctrico por viaje.
BYD sí desglosa la información más relevante de los PHEV
Este es un paso adelante, a pesar de que esta información se evapore del ordenador de a bordo al apagar el motor. Pero, teniendo en cuenta el número de unidades de control a bordo, y lo quisquillosos que son los fabricantes, esta debe almacenarse en alguna memoria interna con acceso solo para dispositivos especiales.
BYD es uno de los pocos fabricantes que ha decidido ofrecer esta información. Sus híbridos enchufables, con tecnología «DM-i», permiten distinguir el kilometraje recorrido del motor de combustión, el eléctrico y los ciclos combinados. Detalles que se tienen en cuenta para calcular los intervalos de mantenimiento, alargándose hasta los 20.000 kilómetros, frente a los 15.000 de los coches con motor térmico.
Una información más clara para los usuarios, que los fabricantes podrían ofrecer a través de una actualización inalámbrica, pero que está claro que no les interesa. Mucho menos a mostrar las horas de funcionamiento de los motores, como ocurre con los vehículos agrícolas.