Tiene 1.505 kilómetros de autonomía, etiqueta CERO y por 37.000 euros es el PHEV que tienes que comprarte
BYD se ha dado cuenta que puede vender más híbridos enchufables que eléctricos. De hecho, ya lo hace. Los chinos aumentan la oferta híbrida con etiqueta CERO con un modelo muy interesante que tenemos que recomendarte.

BYD ya no es esa marca desconocida de hace tres años. En menos de un lustro los chinos han conseguido posicionarse como una de las marcas con mejor proyección en el exigente mercado europeo. A pesar de que hoy cuentan con una fama cada vez mayor, los últimos 36 meses han estado cargados de sobresaltos. Su primera opción era triunfar con los coches eléctricos. Ahora se han dado cuenta que también necesitan los híbridos enchufables. Europa no tiene muy claro ni lo que quiere, pero BYD tiene soluciones para todo.

BYD es el mayor fabricante de Vehículos de Nueva Energía (NEV). Eso quiere decir que son los mayores fabricantes de coches enchufables, híbridos enchufables y eléctricos. Casi 6 de cada 10 coches que venden en el mundo tiene un enchufe, pero también un motor de combustión. El Seal U DM-i fue el primero de sus PHEV en estar a la venta en Europa. En apenas un año se ha convertido en el modelo de la marca más popular en el continente. Los conductores europeos demandan cada vez más híbridos enchufables que no les haga depender de un enchufe.
El segundo acaba de llegar a España y sobre el papel tiene muchos argumentos para triunfar. Se trata del BYD Seal 6 DM-i, y dejando a un lado el galimatías de nombres que se traen entre manos los chinos, es una apuesta muy bien pensada. El segmento de las berlinas europeas ya no es el que era, pero los datos demuestran que todavía tienen un gran potencial en algunos segmentos concretos. Las flotas de empresas y empresas de alquiler de coches todavía compran muchas berlinas. También conductores particulares, aunque en un volumen muy inferior.
Todos los precios, ofertas y versiones

37.000 €
Si echamos un vistazo al segmento de las berlinas de tamaño medio (segmento D) descubriremos no sin cierto asombro que cada vez son menos las opciones disponibles. La mayoría de las marcas generalistas han huido de la categoría. Es un mercado predominantemente premium, hasta ahora. BYD nos presenta una fórmula muy interesante con no uno, sino dos Seal 6 híbridos enchufables. Una berlina clásica de tres volúmenes y un familiar con gran capacidad de carga (Touring).
Ambos miden exactamente lo mismo: 4,84 metros de largo y 2,79 metros de distancia entre ejes. Es un tamaño ideal para convertirse en el único coche de una familia con hasta cinco miembros. No es excesivamente grande como para ser torpe en el día a día y es lo suficientemente grande como para poder viajar cómodamente en él. Obviamente, no nos olvidamos de su capacidad de carga. El Seal 6 Touring ofrece un volumen mínimo de 500 litros, la berlina de 491 litros, aunque su boca de carga es un poco estrecha.

Al abrir sus puertas el Seal 6 nos recibe con materiales de agradable calidad percibida y excelente tacto. Nada tiene que envidiar la calidad de producción de este BYD con la que cualquier otro producto generalista hecho en Europa. Su mayor rival es, posiblemente, el Volkswagen Passat y créeme cuando te digo que el chino no tiene nada que envidiarle. Todo está bien compuesto, es sólido y no presenta fallos visuales. Los chinos, enseñados por los europeos, han aprendido rápidamente a hacer buenos coches.
El equipamiento tampoco supone una pega. BYD estructura su gama de acabados en torno a tres versiones diferentes: Boost, Comfort Lite y Comfort. De serie ofrece una amplia dotación de sistemas como la intrumentación digital y la pantalla táctil central de 12,8 pulgadas. En los acabados superiores suma elementos como la cámara de aparcamiento de 360 grados, asientos delanteros calefactados, techo panorámico, pantalla central de 15,6 pulgadas y el paquete de seguridad y asistentes a la conducción más completo de todos. Mucho más de lo que pueda necesitar el común de los mortales.
La otra razón de su previsible éxito la encontramos debajo del capó. El motor eléctrico se sustituye por un esquema híbrido enchufable de amplio rango. Un motor de gasolina que se combina con otro eléctrico para ofrecer entre 184 y 212 caballos de potencia. La autonomía eléctrica varía entre los 50 y los 105 kilómetros (ciclo WLTP). A diferencia de los eléctricos puros, el Seal 6 DM-i no depende de un enchufe para seguir funcionando, aunque su rendimiento sí se ve condicionado por la presencia o ausencia de electrones en la pila.
Cuando la batería agota su energía el motor de combustión de 98 caballos se queda solo a la hora de seguir impulsando esta berlina de más de 1.700 kilogramos de peso. En ningún caso las prestaciones son fulgurantes. Lo que sí llama la atención es su autonomía. BYD asegura que es capaz de hacer 1.505 kilómetros sin quedarse sin gasolina y batería. Gracias en parte a los hasta 100 kilómetros de alcance eléctrico que anuncia, pero sobre todo a un tanque de gasolina de 65 litros. El consumo real varía mucho en función del tipo de conducción, de la carga de la batería y de la carga del maletero.

A pesar de los condicionantes, el BYD Seal 6 DM-i es capaz de recorrer más de 1.100 kilómetros reales sin ningún problema. Una medida excelente y muy superior a la de cualquier eléctrico. La ventaja añadida que tiene es que disfruta del mismo distintivo ambiental; CERO. La mejor etiqueta otorgada por la DGT le permite poder moverse libremente por las cada vez más comunes ZBE (Zonas de Bajas Emisiones). Tampoco tiene que pagar en estacionamientos en superficie de algunas grandes ciudades como Madrid, por ejemplo.
Un poco más arriba he comentado que el Passat PHEV es, posiblemente, su mayor rival. Si miramos la tabla de precios del alemán descubriremos que el más barato de todos cuesta la friolera de 54.995 euros, sin ofertas o descuentos. Si hacemos lo mismo en la lista de precios del BYD descubriremos que la cifra más baja es de 37.000 euros (38.500 euros para la carrocería Touring). Esto quiere decir que en el mejor de los casos el Seal 6 es 18.000 euros más barato que el alemán. 16.500 euros menos si igualamos las carrocerías familiares. Eso sin contar con los hasta 5.000 euros de ayuda del Plan MOVES III.

Síguenos en Google Discover y mantente informado de las últimas noticias del motor. Haz click aquí
