Qué son los "e cars" que propone el presidente de Stellantis: la solución para los coches eléctricos baratos en Europa
El presidente de Stellantis, John Elkann, vuelve a insistir en la necesidad de adaptar las normativas europeas para la adopción de los populares coches pequeños "kei car" japoneses en nuestro territorio. Así serían los "e cars".

El mercado automovilístico europeo puede entrar en una nueva era dentro de muy poco si se hace realidad la llegada generalizada de coches eléctricos baratos. Modelos como Renault 5 y 4, Dacia Spring, Leapmotor T03, Hyundai Inster y compañía, y la nueva e inminente hornada de las marcas del Grupo Volkswagen, eleva las esperanzas por volver a ver vehículos asequibles en el mercado.
Sin embargo, todavía se necesitan dar unos cuantos pasos más hacia adelante para ver opciones todavía más asequibles. Romper la barrera de los 25.000 euros e incluso la de los 20.000 euros es importante, pero más lo sería seguir rebajando esas cifras. ¿La solución? Desde Stellantis y el Grupo Renault han marcado el camino en los últimos meses.
Ahora, el presidente de Stellantis, John Elkann, vuelve a insistir en esto mismo y lanza un mensaje a los políticos europeos: si queremos coches más pequeños y económicos, y que estos sean rentables para las marcas, se tienen que adaptar las regulaciones. Y aquí es donde entran en juego los "e cars".

Los "kei cars" europeos
Las cifras que compartió Elkann para fundamentar sus propuestas son realmente llamativas: en 2019 había en Europa 49 modelos por menos de 15.000 euros y estos alcanzaron el millón de unidades vendidas. ¿Sabes cómo es ahora, en 2025? Solo hay un modelo que rompe esa barrera (nuestra apuesta es que se refería al Dacia Sandero) y las ventas son inferiores a las 100.000 unidades.
La clave es la rentabilidad, que obligó a las marcas a ir abandonando el desarrollo de este tipo de modelos, presionados en gran parte por la presión regulatoria. Piensa lo siguiente: Europa obliga a las marcas a instalar un gran arsenal tecnológico a bordo en materia de seguridad.
En coches más grandes y caros, el precio de estas tecnologías se diluye más que en un coche pequeño, en el que cada céntimo cuenta para que el cliente pueda adquirirlo a un precio más bajo y para que la marca le saque rendimiento económico. Elkann atribuye a Stellantis un 25 por ciento de sus ingenieros solo para adaptar sus vehículos a las normativas.
¿La solución? Adaptar las reglas de juego a una nueva tipología de coches al más puro estilo de los "kei cars" japoneses. Algo así como los "e cars" para Europa, que necesitarían de una regulación específica: «No hay razón para que si Japón tiene un "kei car", que representa el 40 por ciento del mercado, Europa no tenga un "e car"», recalca el presidente de Stellantis.

Ventajas de los "e cars"
Como ya dijo en el pasado, junto a Luca de Meo (Grupo Renault), este tipo de vehículos debería contar con una menor carga regulatoria, que implique también menos impuestos para los propietarios y seguros más baratos.
Actualmente en Europa está necesitada de coches más baratos y accesibles, sobre todo si quiere acelerar la transición hacia los vehículos eléctricos. Un turismo en nuestra región debe medir al menos 3,5 metros; por debajo ya son cuadriciclos, los cuales cuenta con restricciones que no se adaptan a lo que necesitamos y a lo que tienen en Japón con los "kei cars". Aunque eso signifique también tener coches con menos autonomía eléctrica.
El desarrollo masivo de este tipo de coches traería beneficios para la industria, para los compradores y requeriría de una mayor colaboración entre los fabricantes. El impacto medioambiental también sería reducido de forma importante.
Fuente: AutoNews