El Ferrari 308 GTB más potente del mundo tiene un 4 cilindros turbo de Honda

El especialista StanceWorks ha desvelado el que probablemente sea el ejemplar más extraño y bizarro que podamos encontrar actualmente del Ferrari 308 GTB. Y al decir esto no nos olvidamos de los estrafalarios ejemplares tuneados que eran tan populares en la década de los ochenta, con superlativos kits de carrocería tipo widebody realizados en fibra de vidrio con formas imposibles y modificaciones mecánicas para todos los gustos.

Este taller ha decidido traspasar la línea y ha realizado una de las modificaciones más raras y polémicas que, a juicio de los más puristas, se puede hacer a un clásico de la marca italiana. Eliminar su motor Ferrari para dar calidad a un bloque más pequeño procedente de un fabricante generalista. En un caso como este nos viene a memoria la célebre cita de Enzo Ferrari, quién afirmaba que él «solo vendía motores, el resto del coche lo regalaba».

Este taller ha tomado la versión menos querida por los coleccionistas y por tanto más económica del modelo, el Ferrari 308 GTBi que en 1980 sustituyó los carburadores Weber para estrenar un sistema de inyección Bosch que redujo considerablemente la potencia con el único fin de cumplir las nuevas y más estrictas medidas anticontaminación. Además, el ejemplar empleado por StanceWorks pertenece a la variante de especificaciones estadounidenses, que entregaba solo 205 CV, 9 caballos menos que la versión europea.

Las intenciones de este taller eran simple y llanamente aumentar el rendimiento del modelo y por la mínima cantidad de dinero posible. De ahí que en lugar de modificar el V8 original o emplear cualquiera de los numerosos V8 disponibles en el mercado aftermarket norteamericano, se decidieron por un más pequeño, económico y fiable motor Honda K-Series. Estos bloques de 4 cilindros cuentan con una merecidísima reputación de fiabilidad entre los aficionados al tuning de medio mundo, pues permiten alcanzar cifras muy elevadas de potencia con presupuestos realmente bajos y una gran durabilidad. En el caso de esta pieza de StanceWorks, el resultado está cifrado en torno a los 500 caballos.

El 308 más potente

El techo de potencia de esta serie se cifró en los 274 CV (270 hp) del Ferrari 328 GTB de calle y los 375 CV (370 hp) del Ferrari 308 GT/M de competición creado para cumplir con la normativa de Grupo B. Los Ferrari 288 GTO y Ferrari F40 emplearon un derivado del mismo motor V8 Dino de 2.9 litros que con ayuda de 2 turbocompresores alcanzaron potencias de 400 y 478 CV. Solo las versiones de competición de estos modelos lograron superar los 500 CV, pero ningún modelo de calle relacionado con este motor llegó a superar esas cifras.

Proceso de construcción.