El tiempo nos ha demostrado cómo trabajan las marcas para despistar en el desarrollo de los futuros modelos de coches, mostrándonos auténticos engendros construidos a propósito y confundir todo lo que sea posible. O, incluso "rediseñar" modelos propios con la imagen de la competencia, todo vale en un arte cada vez más perdido por los acortados tiempos y las nuevas tecnologías
Cuando estamos a las puertas de conocer a la segunda generación del Mokka, seguramente ni te imaginarías que bajo esta mula que de pruebas, se escondía un desarrollo muy temprano del Opel Mokka que llegó al mercado al mercado en otoño de 2012, poco más de dos años después. Unas fotos espía inéditas con detalles destacados.
La mayor altura al suelo, los grandes pasos de ruedas y el mayor ancho de los ejes eran unas modificaciones de calado tan evidentes como para saber que bajo la estética del Meriva del año 2000, había un modelo completamente nuevo y diferente. Y, curiosamente, unas características que coincidían con lo que se conocía entonces como "Opel mini SUV".
De hecho, entre el Mokka -o Mokka X- y el Meriva poca diferencia técnica había, ya que el pequeño monovolumen se basó en la plataforma Gamma GM4300 de Opel y el Mokka en una segunda generación de ésta, desarrollada por la división coreana de GM especial para modelos pequeños denominada "Global Small Vehicle", y ampliamente utilizada en modelos de Chevrolet para Sudamérica.
Ahora, ocho años después del lanzamiento al mercado del B-SUV alemán, en las próximas semanas llegará la segunda generación completamente nueva, basado en la plataforma CMP de origen francés. El nuevo Mokka recupera el nombre original del modelo que se estrenó en 2012, incluirá una versión eléctrica y lo hará con un diseño más moderno marcado por el concept del Opel GT X Experimental.
