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El invierno más tranquilo de Lada en WTCC

Por primera vez en las últimas tres temporadas, Lada no tendrá que desarrollar un vehículo nuevo desde cero. La formación rusa afronta un invierno en el que trabajar sobre su Lada Vesta TC1 con la tranquilidad de tener una base sólida.

3 min. lectura

Publicado: 28/12/2015 19:30

La planificación de Lada en el WTCC siempre ha dejado mucho que desear. La marca rusa aterrizó en el campeonato en 2008 con un humilde Lada 110 2.0 y también compitió con el Lada Priora de manera intermitente. Regresó al campeonato en 2013 con el Lada Granta WTCC, un vehículo que cosechó los primeros puntos de la marca durante esa temporada. Una decisión un tanto peculiar ya que un año más tarde entró en vigor la normativa TC1, obligando a transformar el Granta a las nuevas exigencias técnicas. En 2015 se estrenó el Lada Vesta TC1, poniendo fin a una vorágine de cambios.

Con un par de victorias por el camino, si algo no se le puede negar a Lada Sports es trabajo. Prácticamente cada año ha tenido que desarrollar un vehículo desde cero por las exigencias del reglamento, por estrategia comercial o por falta de competitividad. En la pretemporada de 2014 adaptó el Lada Granta a la normativa TC1 y en el invierno previo a la temporada 2015 homologó el Lada Vesta TC1. En definitiva, este será el primer invierno en los últimos tres años en el que Lada parte con una base sólida. Y eso es algo digno de agradecer.

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Con el objetivo de evolucionar el Lada Vesta TC1 desde la base adquirida, un portavoz del equipo se congratula de este hecho: "Estamos en una situación positiva para 2016. Mientras que en años anteriores hemos tenido que construir un coche nuevo cada vez antes del inicio de cada temporada debido a los cambios de reglamento o a la introducción de los nuevos modelos de la gama Lada, para este año los ingenieros de Lada Sport utilizarán las vacaciones de invierno para realizar un programa de pruebas a gran escala y desarrollar el coche ya existente".

El objetivo a corto plazo del equipo ruso pasa por una evolución de la suspensión, del chasis y de la dirección del Lada Vesta TC1, mientras que otro equipo de técnicos están trabajando en conseguir mejorar el software electrónico de la centralita que gestiona la entrega de potencia. Como es habitual, Lada Sports colaborará con su socio técnico ORECA para desarrollar su vehículo y utilizará el circuito francés de Magny-Cours como su campo de pruebas, aunque también acudirá a otros trazados europeos. El trazado galo es cuna de los test del equipo y en él hay muchísimas horas de trabajo y kilómetros acumulados.

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