El Maserati Grecale más barato es también más exclusivo, lujo italiano al máximo nivel en un SUV que impone
Maserati no pierde la esperanza de que su SUV más pequeño consiga levantar el vuelo en Europa. La marca del Tridente no hace más que presentar ediciones especiales, como esta del Grecale Lumina Blu, que presume de lujo y no, esta vez, no es eléctrico...

Maserati está empeñada en hacer que el modelo de acceso a su gama de productos levante el vuelo de una vez por todas. La marca de Módena se jugó el todo por el todo a una sola carta para sustituir un modelo con un emblemático nombre comercial que tampoco tuvo la suerte esperada. Una jugada que no le salió bien y que, nuevamente, sigue sin salirle a pesar de que el fabricante italiana apostó por la carrocería más de moda en el mundo, la de los SUV.
Recientemente, el Maserati Grecale ha recibido una importante inyección de novedades para hacer frente a la competencia alemana con mayores garantías de éxito, pero para los italianos esto parece ser insuficiente, por lo que han presentado una nueva edición especial cargada de equipamiento y con unas configuraciones en el interior que aplacan cualquier intento de pensar en la sobriedad alemana. El nuevo Maserati Grecale Lumina Blu ofrece toda la distinción que uno espera en una categoría como la del segmento D.

El nuevo Maserati Grecale Lumina Blu presume de estilo italiano
Este Grecale se presenta vestido con un traje único, que no admite otras configuraciones, por lo que la carrocería se halla pintada en un color que transmite elegancia. Un azul metalizado bautizado como «Night Interaction», que cuenta con dos capas que realza las contorneadas líneas y los nervios del panel del capó, contrastando con detalles especiales como las pinzas de freno pintadas en amarillo. El mismo color que también baña la insignia de la marca italiana instalada en el pilar trasero, mientras que otros detalles como la parrilla del radiador o las tres aberturas de las aletas están rematados en negro.
Los cristales traseros tintados también contribuyen embellecer más a este Grecale, mientras que los potentes faros Matrix LED brillan por cuenta propia. Sin embargo, el único elemento que es libre de elegir por el cliente es el diseño -«Crio» o «Pegaso»- de las llantas de aleación de 21 pulgadas. El interior también, para lo que Maserati ha creado dos atmósferas que destacan la clase, la artesanía y la elegancia propia de Italia, revistiendo el habitáculo -salpicadero, túnel de transmisión, paneles de las puertas y asientos- de un cuero en color marrón chocolate o un blanco denominado «Ghiaccio», que recuerda al del hielo.
El Grecale más básico alarde de unas cualidades generosas
En ambos casos, la decoración corre a cargo de unas inserciones de madera y a unos pedales deportivos de acero inoxidable, que complementan a un equipamiento de primer nivel incluyendo componentes que, normalmente, son opcionales, como los siguientes:
- Portón trasero eléctrico con sensor de movimiento
- Techo panorámico
- Asientos delanteros eléctricos con 12 ajustes (14 con el cuero «Ghiaccio»)
- Asientos delanteros con calefacción
- Cámara de visión periférica de 360º
Y es que este especial Maserati Grecale Lumina Blu, del que no se sabe cuántos ejemplares estarán disponibles ni tampoco sus precios o fecha de lanzamiento, está basado en la opción más barata de la gama de este SUV deportivo italiano. La versión GT, que hemos sometido a prueba, está equipada con el motor de cuatro cilindros MHEV y 2.0 litros turbo que desarrolla una potencia máxima de 250 CV, y en el que no falta la tracción a las cuatro ruedas con diferencial trasero mecánico de deslizamiento limitado y un cambio automático de ocho velocidades. Eficiencia para el día a día pero con el plus del dinamismo característico de Maserati y un refinamiento sin igual.

