El Rolls-Royce Cullinan suma nuevos detalles al equipamiento opcional. Rolls-Royce adelantó la presentación mundial de su primer todoterreno con un curioso teaser. El «Viewing Suite», dos pequeñas sillas de cuero que emergen del suelo del maletero y desde las que contemplar las vistas más espectaculares desde recónditos paisajes a los que el modelo puede llegar.
Ahora, los de la división de personalización y equipamientos especiales de Bespoke se han inventado un nuevo opcional, el «Módulo de recreación», un cajón que emerge eléctricamente a golpe de botón desde el fondo del maletero que cuenta con una capacidad de 48 litros, y en el que se pueden guardar objetos, quedando completamente oculto. Su acabado es, por supuesto, a gusto del cliente, forrado en maderas nobles o de los materiales textiles más lujosos, a juego con el interior o como el cliente desee.

Un cajón especial de almacenamiento para el maletero del Rolls-Royce Cullinan
Incluso, el interior del cajón se puede configurar de diferentes formas con hasta tres cubículos para diferenciar los artículos almacenados y no mezclarse. El cajón se ha diseñado para mantener el volumen y capacidad de carga del maletero, que cuenta con una longitud de 2.245 milímetros y 1.930 litros.
Un extra más que hacen del Cullinan uno de los modelos más exquisitos del mercado, personalizable al máximo y con la más avanzada tecnología como su suspensión, capaz de adaptarse automáticamente con total finura a cada terreno. La famosa «Alfombra Mágica» llevada al extremo para que los clientes no sientan ninguna de las imperfecciones del terreno por muy sinuoso y difícil que se trate.
Además, el Rolls-Royce Cullinan ha estrenado hace poco tiempo un nuevo modo de conducción «Low», capaz de transmitir unas sensaciones deportivas de vértigo, junto a un escape modificado para transmitir el sonido del potente motor V12 biturbo de 6.0 litros y hasta 600 CV.