Probamos los CUPRA León VZ y Formentor VZ5, la marca española no se olvida de los amantes de la conducción
Los últimos días han venido cargados de novedades de CUPRA, que ha presentado el nuevo León VZ de 325 CV, la edición limitada VZ TCR inspirada en el mundo de la competición, y el renovado Formentor VZ5.

Durante más de dos décadas, el acrónimo CUPRA (Cup Racing) identificó a los modelos más prestacionales de la firma española SEAT. Esta denominación, que debutó en 1996 en el Ibiza de segunda generación, fue ganando prestigio con el paso de los años hasta que en 2018 se tomó la decisión de convertirla en una marca independiente de carácter aspiracional.
Aunque CUPRA mantiene tanto sus agresivos diseños como una puesta a punto deportiva en todos sus modelos, su emancipación ha conllevado la adopción de mecánicas menos potentes con el objetivo de llegar al gran público; de hecho, la motorización más popular del Formentor es el 1.5 TSI de 150 CV, que si bien es un gran propulsor, queda lejos de la radicalidad de los antiguos CUPRA de SEAT.

Este papel ahora lo representan las versiones VZ, dos letras que hacen referencia a la palabra 'veloz'. Los vehículos con este apellido son los más prestacionales de la gama independientemente de su tecnología: CUPRA no se limita a ofrecer modelos VZ de gasolina, sino también híbridos enchufables e incluso 100% eléctricos como los Born y Tavascan.
Hace escasos días, el fabricante presentó la última evolución de la gama León VZ, cuyo motor 2.0 TSI ahora pasa a rendir 325 CV en lugar de los 300 CV anteriores, convirtiéndose por lo tanto en el tracción delantera más potente de CUPRA. Esta novedad ha venido acompañada por la nueva edición limitada VZ TCR, de la que sólo se harán 499 ejemplares.
En paralelo también se ha presentado el renovado Formentor VZ5, que sigue equipando el conocido propulsor 2.5 TSI de cinco cilindros y 390 CV que hizo las delicias de los aficionados en el modelo pre-restyling. En Motor.es hemos tenido la oportunidad de ponernos al volante de ambos durante su presentación en Barcelona.

CUPRA León VZ: ahora con un extra de picante
Antes mencionábamos que el León VZ TCR, previsto para finales de 2026, estará limitado a 499 unidades. Pero el nuevo León VZ de 325 CV, que llegará en el primer trimestre del año que viene con exactamente la misma mecánica, no tendrá una tirada mucho mayor, ya que sólo se harán 1.500 ejemplares.
El compacto sigue utilizando una caja de cambios de doble embrague DSG con siete relaciones, así como el bloqueo de diferencial electrónico VAQ. Esta tecnología, que busca mejorar la motricidad del vehículo, tiene en cuenta los datos en tiempo real del ángulo de la dirección, la velocidad de las ruedas y la guiñada para optimizar la entrega de potencia. Las prestaciones son simplemente fulgurantes, con un 0-100 km/h en 5.4 segundos y una velocidad punta limitada a 270 km/h.

Si bien se mantiene un esquema McPherson delante y multibrazo detrás, los muelles y amortiguadores han sido recalibrados; por otro lado, el control de chasis adaptativo DCC permite ajustar en cuestión de milisegundos la firmeza de los amortiguadores. También habría que mencionar los frenos Akebono con pinzas de 6 pistones y discos delanteros ventilados y perforados.
Mientras que el VZ está pensado para la conducción diaria, el VZ TCR será mucho más radical y estará orientado a los circuitos; no en vano, rinde homenaje al León VZ TCR de competición, que esta temporada ya ha conseguido títulos en los campeonatos TCR Europe, TCR UK, TCR México y TCR France. Aunque tiene exactamente la misma potencia que el VZ 'a secas', el VZ TCR es ligeramente más lento (0-100 km/h en 5.6 segundos); a cambio, su velocidad máxima no está limitada electrónicamente.

VZ para diario y VZ TCR para circuito
Elementos como el arnés de seguridad o los asientos traseros desmontables nos retrotraen a la época en la que los fabricantes de hot hatches 'vaciaban' sus compactos para lograr el mejor tiempo posible en Nürburgring. El actual récord para vehículos de tracción delantera en el trazado alemán está en manos del Honda Civic Type R. ¿Será este el objetivo a batir por CUPRA?
Las llantas de aleación ligera específicas montan unos neumáticos de alto rendimiento y 245 mm de ancho, mientras que los asientos delanteros CUPBucket disponen de unos cinturones de seguridad de cuatro puntos. La insignia delantera en negro cromado en lugar de cobre mate y el número de serie grabado con láser en el panel de la puerta buscan distinguirlo de otros León VZ.
A esto también ayuda un kit estético formado por dos splitter (uno delante y otro detrás), faldones laterales, un difusor, las carcasas de los retrovisores en fibra de carbono y un alerón en el techo. Pero sin duda, lo que más llama la atención es el gráfico lateral que dibuja el logotipo de CUPRA, un guiño al mundo de la competición que desde luego no pasa desapercibido.

CUPRA Formentor VZ5: corazón de Audi
CUPRA comenzó su andadura comercial en 2018 de la mano del Ateca, compartido con SEAT, pero su primer modelo exclusivo no tardó demasiado en llegar: el Formentor vio la luz en 2019 y rápidamente se convirtió en un rotundo éxito de ventas; de hecho, a día de hoy se erige no sólo como el modelo más popular de CUPRA, sino también de SEAT S.A. en su conjunto.
Dado que se trata del buque insignia de la marca, no es de extrañar que la exclusiva versión VZ5 se haya reservado sólo para él. Y es que, aunque los León y Terramar también se asientan sobre la plataforma MQB Evo del Grupo Volkswagen, ninguno de ellos tiene derecho al prestacional motor de cinco cilindros utilizado en el Formentor más potente.

Este propulsor, que es producido por Audi en Györ (Hungría), es un 2.5 TSI turboalimentado de 390 CV con bloque de aluminio. Se combina con una caja DSG de siete marchas que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 4.2 segundos; además, la velocidad máxima ya no está limitada, lo que le otorga una punta de 280 km/h, una cifra más digna de un superdeportivo que de un crossover compacto.
Limitado a 4.000 unidades para todo el mundo (incluidos los mercados con volante a la derecha, algo que no ocurría con su predecesor), el nuevo Formentor VZ5 cuenta con una suspensión rebajada 10 mm y un chasis adaptativo DCC con 15 niveles de ajuste para la firmeza de la amortiguación. El sistema Torque Splitter, que está formado por dos embragues multidisco bañados en aceite, se encarga de distribuir el par de forma independiente a cada una de las ruedas traseras.
Esto no sólo mejora la estabilidad del coche en curvas, sino que también habilita un modo Drift: al desconectar el ESC y derivar todo el par a la rueda trasera exterior de la curva, se pueden realizar derrapes controlados de forma más sencilla. En total hay seis modos de conducción: Comfort, Sport, CUPRA, Individual, Offroad (no deja de ser un SUV con tracción total) y el ya mencionado Drift. El sistema de frenado vuelve a estar formado por pinzas de seis pistones Akebono y discos ventilados y perforados.

Vuelve el buque insignia de CUPRA
Puesto que el Formentor tiene ya de por sí un diseño llamativo, el VZ5 se limita a realzarlo con detalles como un nuevo splitter frontal, las llantas de 20 pulgadas exclusivas en acabado cobre y negro, los paragolpes rediseñados, los pasos de rueda ensanchados y algunos elementos en fibra de carbono como el alerón trasero. La paleta de colores está formada por los tonos Negro Midnight, Dark Void, Gris Magnetic Mate, Bronce Century Mate y Gris Enceladus Mate.
Los asientos Bucket se incluyen como estándar, pero los CUPBucket pueden elegirse como opción. El cuadro digital de 10.25 pulgadas muestra datos como el régimen de giro del motor, el par, la presión del turbo y las fuerzas G... siempre y cuando seleccionemos el modo CUPRA View. Por último, el sistema de audio Sennheiser de 12 altavoces y 390 W busca ofrecer un sonido envolvente y preciso, dando continuidad a la colaboración entre ambas empresas.

Durante la presentación pudimos probar brevemente tanto el León VZ como el Formentor VZ5 en un tramo cerrado. Si lo que se busca es la mayor deportividad posible, entonces el primero debería ser el elegido, ya que ofrece un comportamiento más dinámico y su menor potencia apenas se deja notar a la hora de la verdad.
La física no miente: su menor altura y peso tienen mucho que ver con esta superioridad. El Formentor VZ5 es menos radical y se siente un poco menos ágil, aunque sigue siendo decididamente rápido. El motor tiene un sonido simplemente espectacular, y ofrece un empuje muy contundente que hará las delicias de aquellos que quieran un coche que combine unas prestaciones del primer nivel con cierto grado de practicidad y usabilidad.

