La Fórmula 1 como plataforma para un cambio de imagen en la automoción

La Fórmula 1 apostó muy fuerte por los motores híbridos cuando, en 2014, implementó el nuevo reglamento de motores que exigía el uso de un bloque V6 turboalimentado con dos recuperadores de energía incluidos en el mismo: MGU-H (asociado a los gases de escape) y MGU-K (asociado al cigüeñal).

Ello permitió que la categoría contara con el motor más sofisticado y eficiente de la historia de la automoción, pero también condenó a la Fórmula 1 a mantenerse con los mismos fabricantes que habían apostado inicialmente por dicha tecnología: Mercedes, Ferrari, Renault y, desde 2015, Honda.

«Los fabricantes pueden usar la F1 para obtener la nueva imagen que tal vez necesiten para el futuro»

A pesar de haberse intentado atraer más fabricantes, la complejidad y coste económico del reto, así como su casi seguro suicidio deportivo (como demostró Honda entrando sólo un año más tarde que el resto), han hecho que ni Porsche, ni Lamborghini, ni muchos otros quisieran correr el riesgo.

El nuevo reglamento, imprescindible

Al menos no mientras las reglas del juego sigan estables, algo que la Fórmula 1 quiere cambiar a partir de 2025. «No es posible que la unidad de potencia de la Fórmula 1 cueste lo que está costando actualmente y atraer nuevos proveedores. Creo que hay un margen, un gran margen en eso, y una de las agendas que tenemos es que nos gustaría involucrar a los equipos y fabricantes para tratar de anticipar el nuevo motor incluso antes de lo que se espera», apunta Stefano Domenicali.

El actual presidente de la Fórmula 1, y CEO de Lamborghini durante el frustrado proceso de negociación de la categoría con diversas marcas en 2017 y 2018, sabe bien cuáles son los inconvenientes a los que se enfrentan ambas partes a la hora de llegar a un acuerdo con el reglamento actual.

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Por tanto, el italiano espera transformar la reglamentación de motores para estar en disposición de ofrecer a los fabricantes un modelo tecnológico más acorde a sus necesidades. Es decir, una tecnología más barata y sencilla de fabricar y desarrollar, pero igualmente híbrida y adaptada a las nuevas tendencias del sector.

«Creo que uno de los mayores desafíos que tienen los fabricantes de automóviles hoy en día es sentirse más jóvenes», apunta Domenicali. «Hay este tipo de lucha entre la antigua escuela de fabricantes y los nuevos que están llegando en cuanto a la movilidad. Pero creo que los fabricantes pueden usar esta plataforma para obtener la nueva imagen que tal vez necesiten para el futuro».

El también exdirector de la Scuderia Ferrari desvela que la Fórmula 1 «está en conversaciones con otros fabricantes. Por el momento, prefieren quedarse callados, pero la buena noticia es que hay otras empresas, empresas muy importantes, que están realmente interesadas en entender cuál es el valor que pueden aportar a su marca utilizando la plataforma F1».

Y, como el italiano confirma, dicho valor no se materializará «sólo en términos de tecnología, también del valor de lo que la Fórmula 1 puede aportar al fabricante de automóviles».

Fuente: Sky SportsFotos: Renault F1 Team