Key, ávido de un 2018 junto a Honda: "Es una liberación"

La infructífera alianza entre McLaren y Honda tocará a su fin al término de la presente temporada, tras tres años de resultados prometedores que no han acabado de llegar y una fiabilidad nipona bastante cuestionable. Como consecuencia, Liberty Media hizo todo lo posible para que el motorista japonés se mantuviera en Fórmula 1, para así evitar que la imagen de la categoría se viera dañada con la vuelta de un suministrador de motores históricos y una marcha tan repentina.

Toro Rosso fue la pieza clave que surgió en dicha operación, y la evolución del motor Renault que alimenta actualmente al STR12 pasará a la trasera del futurible ‘MCL33’ en 2018. “Es muy emocionante; realmente es como una liberación”, confesó James Key en relación a este cambio que se hará efectivo el año que viene. “Es el tipo de cosa que siempre quieres hacer para dar el próximo paso con tu equipo, y no ha sido posible hasta ahora”.

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El director técnico de los de Faenza aseguró que, aunque este hecho supone “un reto enorme y también una tremenda responsabilidad para ellos”, la idea de “contar con un socio en vez de con un suministrador” posibilita que puedan “hablar de todo el proyecto y encontrar las mejores soluciones”.

Hasegawa huye de culpar a la comunicación entre ambas partes por el fracaso de su unión, algo en lo que, por el momento, Key parece estar de acuerdo. “Tengo que decir que la comunicación ha sido bastante buena, son increíblemente rápidos a la hora de responder a cualquier pregunta o petición. Parece que tienen mucha información disponible, son capaces de proporcionarte rápidamente cualquier dato concreto. Hemos tenido muchas charlas técnicas, y nos han apoyado muy bien”.

Ha sucedido varios meses antes de lo que nos pasó con Ferrari en 2015. Es bastante más fácil lidiar con algo así

Además de a un presupuesto limitado, Toro Rosso deberá hacer frente, una vez más, a otro cambio de última hora de cara a la próxima temporada. No obstante, el responsable técnico garantizó que a pesar de que ya hubieran dado los primeros pasos en la elaboración del nuevo chasis, esto no les supondrá un contratiempo. “Hemos desarrollado una gran capacidad de adaptación y flexibilidad en el equipo al tener que salir adelante tras decisiones tardías o cambios en la dirección; algunas las esperas, otras quizás no”.

“Somos muy proactivos con nuestros planes, reflexionamos todo lo máximo posible”, explicó Key. El hecho de que hayan alternado entre Ferrari y Renault para su unidad de potencia en los últimos años, con un propulsor italiano de una temporada anterior, les ha hecho sobreponerse a las adversidades y ser más fuertes que nunca. “Si existe la posibilidad de que algo ocurra, inmediatamente nos planteamos el ‘¿Y si?’. Ha sucedido varios meses antes de lo que nos pasó con Ferrari en 2015. Es bastante más fácil lidiar con algo así, aunque aún hay mucho trabajo por hacer”, concluyó Key.

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Fuente: AutosportFotos: Red Bull Content Pool