Lance Stroll: "El dinero no puede comprar victorias"
- El piloto canadiense niega que sus triunfos sean sólo fruto del considerable apoyo económico de su padre.
- Considera que haber obtenido los puntos de la Superlicencia justifica su presencia en la parrilla de Fórmula 1.
- "Podría tener todo el dinero del mundo y acabar último".
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Publicado: 21/12/2016 09:40
La llegada de Lance Stroll a la Fórmula 1 ha estado rodeada de cierto aura de polémica a raíz de los numerosos recursos económicos de los que el piloto canadiense ha dispuesto a lo largo de su carrera. El joven piloto de 18 años es hijo del magnate de la moda Lawrence Stroll, y su apoyo financiero no sólo le permitió pagar los mejores asientos en la Fórmula 4 italiana y la Formula 3 europea (viajando a los circuitos con trailers de estándar F1), si no que ha jugado un rol crucial en su pronta ascensión al equipo Williams, con diversas informaciones apuntando a un gasto de hasta 80 millones de dólares para su preparación.
Todo sin tener en cuenta las polémicas y accidentes en los que Stroll se vio involucrado en 2015, su primer año en Formula 3. Sin embargo, el próximo piloto de Williams terminó la temporada con buena nota y en 2016 ha sido el dueño y señor del campeonato, obteniendo 14 victorias en las 33 carreras disputadas, con una clara ventaja sobre su compañero Maximilian Günther.
Consciente de que la enorme fortuna familiar, junto a su juventud y potencial tendencia problemática, es algo que despierta recelos en sectores del paddock, Stroll ha querido salir a la palestra para reafirmar sus logros, justificando que el dinero no ha sido lo que le ha hecho ir rápido:
"Esto funciona de dos formas. Una de ellas es tener un sponsor o un familiar que te ayude desde los ocho años hasta la edad en la que llegas a la Fórmula 1, si llegas. Sin ello, no habría sido capaz de salir de Canadá hacia Europa y perseguir mi sueño. Después de eso, no importa cuanto dinero tengas o de dónde vengas; si no giras el volante a izquierda o derecha, ni vas lo más rápido posible en una pista, no ganas carreras".
La generosa dotación de puntos que otorga la Fórmula 3 europea para la Superlicencia ha sido un factor determinante, permitiendo al canadiense contar con el número necesario para competir en Fórmula 1 en 2017. Por ello, Stroll reafirma la validez de su ascenso: "El dinero no puede comprar victorias. Puede comprar la oportunidad, si compras un asiento en karts, F4 o F3, pero si no tienes los puntos de la Superlicencia, que requiere ganar campeonatos como la F4, la F3 o la GP2, no puedes llegar a la Fórmula 1. Tienes que conseguir esos 40 puntos, y yo lo he hecho".
El de Williams, eso si, no ha negado que el dinero "te permite correr, eso es cierto. Podría tener todo el dinero del mundo y acabar último, y eso no me pondría donde estoy. He trabajado muy duro para ganar esos campeonatos, y sin ello no estaría aquí". Incluso se ha mostrado consciente de que otros muchos no han llegado por la falta de esos recursos: "Estamos en un deporte muy caro, y hay muchos pilotos muy talentosos que no han tenido la oportunidad, lo que es una pena".
Fotos: Williams