Otra despedida más, y esta por doble, los Dodge Charger y Challenger se retiran después de dos décadas de dominio en el mundo del motor
Los últimos días del año está dejando al descubierto un buen número de modelos que no desaparecerán del mercado europeo. Las nuevas normas de emisiones más estrictas y las de seguridad, junto con el paso a los coches eléctricos, suponen el adiós de dos míticos como los Dodge Charger y Challenger.
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Publicado: 27/12/2023 16:00
Dos de los deportivos «Made in America» más ansiados del mundo ya son historia. Tras casi veinte años en producción, los Dodge Charger y Challenger han pasado a mejor vida. La marca americana ya anunció su desaparición a principios del pasado verano, un anuncio que vino acompañado posteriormente de una edición especial, la última equipada con una de las insignias del fabricante, el motor de gasolina V8 HEMI.
Como el Camaro se despidió de producción hace tan solo unas semanas, estos dos «muscle car» ya no están disponibles para pedidos dejando huérfana por ahora a la factoría de la marca en Ontario, Canadá. De ella, ha salido recientemente una de las últimas unidades de una de las berlinas más salvajes del mundo que probamos, equipada con el paquete especial «Scat Pack Widebody» y con el cuerpo de la carrocería pintado en un color a la altura, un tono de gris más propio de un caza o de un destructor.
Producción del Dodge Charger y Challenger 2024 en la planta de Brampton, Ontario, Canadá
El adiós a los Dodge Charger y Challenger llega antes de lo deseado
El último ejemplar del Challenger también ha sido una de las unidades más especiales, un SRT Demon 170 pintado en negro equipado con el potente corazón de 6.2 litros sobrealimentado que desarrolla una potencia máxima realmente brutal: nada menos que 1.025 CV sin ningún tipo de electrificación a cuestas. Cifras apabullantes que no quedarán en el olvido, porque Dodge ya ha confirmado que ambos modelos seguirán ofreciendo semejante rendimiento aunque convertidos en eléctricos.
La firma ya está dando forma a los relevos, al mismo tiempo que la sede de Brampton se está adaptando a una remodelación integral para instalar las plataformas «STLA Medium» y «STLA Large», una de las más avanzadas y diseñadas para modelos de gran potencia y altas prestaciones que, hasta ahora no se ha estrenado, pero que también usará Alfa Romeo en los sustitutos de los Giulia y Stelvio, además de un buque insignia que llegará después de mediados de la década con más de 1.000 CV.
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Dodge volverá a abrir las puertas de esta factoría a a finales de 2025, albergando la próxima generación del Jeep Compass basado en la plataforma STLA Medium, la misma del recién estrenado nuevo 3008 apta para motores de combustión electrificados y eléctricos puros. Los futuros Charger y Challenger ya no se fabricarán en esta sede, sino que se mudarán a la planta de Windsor, donde montarán un esquema eléctrico de nueva generación, y cuyo rendimiento los hará mucho más rápidos y brutales que los últimos de combustión.
