El desagradable e inesperado 'regalo' adelantado de Navidad del gobierno francés con los coches eléctricos
A finales del 2023 fue Alemania la que dio la sorpresa al suprimir las ayudas a la compra de coches eléctricos y ahora, terminando el 2024, es nuestra vecina Francia la que ha dado una desagradable sorpresa a sus conciudadanos.
Las ayudas para comprar coches eléctricos son fundamentales si los gobiernos quieren cumplir con sus objetivos de transición hacia un modelo de movilidad más eficiente. También lo son para los fabricantes, especialmente en un contexto actual en el que deben cumplir con estrictos límites de emisiones en los coches que venden.
El enfriamiento de la demanda de coches eléctricos a nivel mundial no ayuda, es cierto, como tampoco que la Unión Europea vaya a imponer sanciones económicas a las marcas que excedan unos límites más estrictos en las emisiones medias de CO2 a partir del año que viene.
Si no fuera suficiente todo esto, algunos mercados nacionales han estado reduciendo los incentivos públicos que alimenten la venta de más coches eléctricos. Alemania las suprimió del todo a principios de este año, Noruega se movió en el mismo sentido y ahora es Francia la que mueve ficha, y además de forma anticipada.
En búsqueda de un mayor ahorro por parte del gobierno francés, la cuantía total de la inversión para el 2025 en ayudas públicas se queda en los 1.000 millones de euros, frente a los 1.500 millones de este año 2024; sin embargo, en realidad serán 700 millones para el año que viene, ya que 300 se usarán para cubrir el exceso presupuestario del presente ejercicio.
El gobierno francés adelanta la fecha
Ya se sabía que en Francia las ayudas a la compra de coches eléctricos iban a verse reducidas de forma progresiva y que en 2025 se impondrían nuevos tramos para sus ciudadanos. Sin embargo, la sorpresa saltó al conocerse que el gobierno galo quiere adelantar esta medida un mes.
En apenas unos días desaparecerán las ayudas a la compra de coches eléctricos tal y como las conocíamos hasta ahora en nuestro país vecino, según se apruebe el decreto inminente por parte del gobierno. Eso sí, habrá un período transitorio de tres meses para los vehículos pedidos justo antes de la entrada de en vigor de este.
Esto quiere decir que los franceses que querían comprarse un coche eléctrico y aprovecharse de la última hornada de ayudas públicas a este nivel, tendrán que darse prisa. Por otra parte, supone un varapalo para las marcas que estaban esperando a final de año para vender sus coches eléctricos a mejores precios.
En Francia, a diferencia de en España, estas ayudas del bono ecológico dependen de los ingresos del comprador: cuanto más dinero entre en casa cada mes, menos bonificaciones tienes para la adquisición de un coche eléctrico, y viceversa.
De esta forma, los franceses con una renta fiscal inferior a los 15.400 anuales, que hasta ahora tenían una ayuda de 7.000 euros, ahora tan solo tendrán 4.000 euros de subvención para comprar un coche eléctrico. El siguiente tramo pasa de 4.000 a 3.000 euros, mientras que el último se reduce a 2.000 euros.
Más detalles de las ayudas en Francia
El gobierno francés incluso quería eliminar este último tramo de ayudas, pero se dieron cuenta de que este es el que más solicitudes ha recibido en el bono ecológico, por lo que se mantiene, cómo no, reduciendo la ayuda a percibir.
Lo que sí se ha eliminado de raíz es la ayuda a la compra de un cuadriciclo eléctrico: desaparece la subvención de 900 euros, lo que supone un varapalo a modelos como el Citroën Ami o el Mobilize Duo, que ya no estarán en el catálogo de ayudas en Francia.
No se sabe todavía si se reducirá o no el límite fijado hasta ahora de 47.000 euros en el precio total del vehículo excluyendo opciones, como tampoco las condiciones de un alquiler social que se estrenó en Francia este año y que se quiere renovar para el 2025.
Lo que sí se sabe es que seguirá en vigor la puntuación medioambiental de los modelos que pueden entrar en el baremo de las ayudas públicas, algo que restringió el acceso a los coches eléctricos fabricados fuera de Europa. Sin embargo, la reducción de las ayudas públicas terminará por hacer más competitivos, por ejemplo, los coches chinos en el mercado francés.
Fuente: Forococheselectricos.com