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El G-Power GX5M BI-TURBO convierte al SUV bávaro en uno de los deportivos más brutales

El BMW X5 M Competition es una de las creaciones más brutales en la categoría de los SUV deportivos. La marca de Múnich es de las que piensa que no está reñido espacio y confort con la máxima deportividad. Una tesis que también comparten los de G-Power, y que han convertido al modelo alemán en una verdadera bestia, la del GX5M BI-TURBO.

El G-Power GX5M BI-TURBO convierte al SUV bávaro en uno de los deportivos más brutales
G-Power GX5M BI-TURBO - G-Power

4 min. lectura

Publicado: 14/12/2021 09:00

La firma de Múnich trabaja en una edición especial del X5 M que presentará en 2022, y al que ya hemos visto en pruebas. En poco más de año y medio también llegará una actualización de medio ciclo de vida al SUV germano, incluida también las versiones más deportivas. Hasta que ese momento llegue en 2023, los de G-Power han presentado su última gran novedad basada en el tope de la gama del BMW X5.

Los alemanes han sacado verdadera punta a toda su experiencia para hacer del X5 M Competition todo una bestia. Y es que el GX5M BI-TURBO es una auténtica y brutal bestia pero solo por dentro, bajo la carrocería porque, por fuera, no da esa impresión. Más bien es lo que se conoce como un lobo con piel de cordero, porque apenas cambia en el lado estético comparado con el modelo de serie. Llama más la atención por las llantas de aleación forjadas de hasta 23 pulgadas de diámetro pintadas en negro de la serie Hurricane, como los deportivos más exclusivos salidos del taller del preparador.

Foto G-Power GX5M BI-TURBO - interior
El interior del G-Power GX5M BI-TURBO prácticamente no se ha retocado comparado con el del BMW X5 M

El G-Power GX5M BI-TURBO es uno de los SUV más extremos

Lo realmente interesante se encuentra bajo el panel del capó. Al levantarlo y ver la cubierta de carbono y trazos naranjas, ya nos podemos hacer una idea que las grandes novedades se encuentran en este vano delantero. Los especialistas en tuning ofrecen diferentes niveles de potencia.

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La firma ofrece una primera etapa, en la que el potente motor V8 biturbo de 4.4 litros experimenta un importante aumento. El bloque, conocido internamente como «S63B44B», suma una nueva unidad de control del motor con nuevos mapas de inyección que reproducen la misma cifra de potencia máxima que el «kit GP-700». Un nivel básico que supone nada menos que 75 CV extras de golpe y porrazo comparado con el X5 M Competition de serie, sumando 100 Nm más al par motor máximo y llegando hasta los 850 Nm.

La opción «GP-750» vuelve a contar con una nueva unidad de control del motor que mejora del rendimiento, pero se completa con nuevos colectores y un sistema de escape deportivo con control de válvulas, con el que la potencia máxima asciende hasta los 750 CV y el par motor máximo hasta los 900 Nm. La cuenta sigue subiendo, pues el nivel máximo es el GP-800 y poco más hay que detallar. La cifra de potencia máxima está más que clara, nada menos que 800 CV, y el par motor asciende hasta los 950 Nm, gracias a todo el paquete anterior más unos nuevos turbocompresores con una mayor presión de sobrealimentación.

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