Presentación en Madrid del Mazda CX-5: Filosofía renovada
Mazda ha presentado en la capital española su nuevo SUV compacto, el CX-5. Se trata del primer modelo del fabricante japonés que incorpora todas las novedades de la tecnología Skyactiv. El crossover de Mazda también muestra los rasgos de la nueva filosofía de diseño bautizada como KODO. Probamos los CX-5 2.0 160 CV AWD con cambio manual y automático.
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Publicado: 05/05/2012 07:30
Ayer pudimos disfrutar de una jornada con la gente de Mazda, quienes nos enseñaron todos los detalles que encierra el nuevo Mazda CX-5. El SUV del fabricante japonés supone el primer modelo de producción en mostrar la nueva línea de diseño KODO y las innovadoras tecnologías Skyactiv.
El CX-5 nace con la intención de cubrir el importante segmento de los SUV compactos y el modelo japonés lo quiere hacer por la puerta grande. Exhibe un importante arsenal tecnológico que afecta a los motores, transmisiones, chasis y carrocería con el objetivo de conseguir un coche más ligero, resistente, eficiente y respetuoso con el medio ambiente sin sacrificar un alto nivel de agrado de conducción: Es la tecnología Skyactiv y sus soluciones principales os las describimos hace pocos meses cuando os hablamos de la exposición temporal Mazda Skyactiv Experience.
En aquella exposición también tuvimos la oportunidad de tener nuestro primer contacto cara a cara con el Mazda CX-5. Se trataba de una unidad de pre-serie que, si bien le faltaban algunos detalles por pulir hasta la versión de producción definitiva, ya nos dejaba bien claro que el crossover japonés prometía ser un modelo a tener en cuenta cuando aterrizase en el mercado.
Las primeras unidades de gasolina llegaron hace pocas semanas a nuestro país mientras que las mecánicas de gasóleo, que previsiblemente serán las más demandadas, vendrán a finales de este mes.
La gama del CX-5 se compone de dos niveles de acabado -Style y Luxury- y tres motores, los cuales se pueden combinar con varias opciones de tracción -delantera o total- y transmisión -manual o automática- dependiendo del acabado y la motorización elegida. Las motores disponibles son un 2.0 de gasolina que entrega 165 CV en las versiones de tracción delantera y 160 CV en las AWD, y dos turbodiésel de 2,2 litros con 150 y 175 CV.
En la presentación hemos podido disfrutar del CX-5 2.0 160 CV Luxury con cambio automático. Ofrece una buena habitabilidad interior -al nivel del Mazda CX-7 que probamos con anterioridad, pese a que es 12,5 cm más corto-, un buen confort de marcha y unos acabados de gran calidad. La caja automática es muy suave en la transición entre marchas y tiene una configuración que invita a una conducción relajada en modo completamente automático, siendo necesario utilizar el modo secuencial si queremos realizar una conducción más enérgica.
Nos ha dejado tan buen sabor de boca que queríamos más y nos hemos venido con otra unidad debajo del brazo para disfrutarla con tranquilidad durante unos días. Lleva el mismo propulsor de gasolina pero asociado al cambio manual y en acabado Style. Te contamos con todo detalle nuestras impresiones sobre el Mazda CX-5 en nuestra prueba del modelo.
