BRABUS transforma al Range Rover en un verdadero superdeportivo, un SUV superlativo que asombra más por dentro que por fuera
Por naturaleza, los modelos de la marca de la estrella son los preferidos de BRABUS pero el preparador alemán también retoca los más exclusivos de otras marcas. El último en sumarse a su catálogo más exquisito ha sido el Range Rover P530, un SUV de lujo que refuerza mucho más esta cualidad y la de sus prestaciones.
El Range Rover es uno de los modelos más deseados del mercado, pero también uno de los que más lejos están del alcance del común de los mortales. Mucho más todavía en esta última generación que, prácticamente, se ha diseñado para los exquisitos clientes de los Emiratos Árabes, donde el dinero y el precio de la gasolina para alimentar a semejante modelo no es un problema.
Objeto de múltiples especialistas en tuning, el último en sumar a su prestigioso catálogo ha sido BRABUS. Una vez más, ha dejado de lado a los modelos de la marca de la estrella para presentar su última gran novedad sobre este Range Rover, que no solo destaca por unas cualidades en el asfalto más que deportivas, sino por unas características y un acabado interior de verdadero ensueño. Por fuera, el SUV de Land Rover más codiciado se ha pintado en negro brillante destacando también por una nueva imagen más agresiva gracias a un paragolpes de nueva factura.
BRABUS estrena novedades en el lujoso Range Rover
La defensa ahora cuenta con unas tomas de aire de mayor tamaño, lo que asegura un importante extra de refrigeración de la mecánica, resaltadas todas por unos apliques decorativos de fibra de carbono. El paragolpes cuenta con un fino spoiler en el labio inferior que imprime más carga aerodinámica en el eje delantero. Por detrás, la vista no tiene precio, el inserto trasero también es nuevo, cuenta con cuatro escapes en dos parejas en cada extremo, separadas por un difusor, y sobre el portón descansa otro spoiler más.
Entre medias, el Range Rover de BRABUS monta un calzado imponente, con llantas de aleación forjada de 24 pulgadas, al mismo tiempo que la suspensión también se ha rebajado en 20 milímetros convirtiendo al SUV en un verdadero superdeportivo. Por supuesto, los diseños y los acabados son múltiples, a gusto del cliente. Como también el interior, aunque la propuesta del preparador alemán es una de las más seductoras. Salpicadero, paneles de las puertas y asientos están forrados en cuero de color verde pistacho, con las banquetas en un nuevo acolchado de conchas marinas.
La deportividad llega al Range Rover de la mano de BRABUS
Pero si por fuera y por dentro atrae, sus enormes prestaciones lo hacen más. Basado en la versión P530, que dispone del potente motor de gasolina V8 de 4.4 litros biturbo con 530 CV, la ayuda de BRABUS arroja unas nuevas cifras de verdadero ensueño. La inestimable ayuda de la centralita del preparador aumenta la potencia máxima hasta unos redondos 600 CV y un par motor máximo de 800 Nm, lo que se traduce en una aceleración de cero a 100 km/h en solo 4,5 segundos y una velocidad máxima de 250 km/h. Limitada, porque si no lo estuviera, tiene todo el viento a favor para acercarse mucho a los 300 km/h.