Se acabó el sueño, Volkswagen mata al eléctrico que quiso ser el Tiguan Coupé
Lo han intentado de todas las formas posibles, pero los resultados no han acompañado, lo que ha obligado a Volkswagen a mover una importante ficha con sus eléctricos. Sí, has leído bien, la marca de Wolfsburgo ha sentenciado a uno de sus modelos de cero emisiones, al no cumplir con los objetivos y al que despedirá en 2027.

Volkswagen siempre ha tenido un gran problema, pero al que ha conseguido darle la vuelta y convertirlo en una virtud. Los alemanes no han escatimado en lo que se trata de lanzar nuevos modelos al mercado, sí en otras áreas relacionadas con la calidad de fabricación, pero no en cuanto a cubrir el mayor número de huecos en la oferta.
El ejemplo del Taigo es uno de los más notables. Un modelo que casi podía matar al primer SUV de la gama o, lo que es peor, a una gallina de los huevos de oro como el T-Roc. Sin embargo, esa estrategia le ha traído a los de Wolfsburgo más que pingües beneficios. Pero no todos los modelos de la gama brillan, porque hay un eléctrico en el que se han concentrado importantes esfuerzos y el resultado ha sido nulo: hablamos del Volkswagen ID.5.

El ID.5 no está invitado a la fiesta del coche eléctrico en Volkswagen
Volkswagen lanzó este SUV eléctrico para cumplir un sueño que no había podido tener antes, el de un Tiguan coupé que tuvo en sus planes muchos años atrás pero que nunca consiguió hacer realidad. Con su gama de coches eléctricos ID. ya tenía vía libre para encajarlo a la perfección y matar un segundo pájaro de un solo tiro, porque el ID.5 se puede considerar como un alto de gama, al menos entre los SUV sin ningún modelo por encima.
Los alemanes han superado todos los problemas que se les ha presentado por delante en la configuración de la gama de coches eléctricos, situando al ID.4 como una de las más importantes referencias en el continente europeo. Tanto, que ya está aventurando una profunda revisión que llegará a mediados de 2026, pero a la que no se sumará la variante de carrocería más deportiva, aunque a alguno le cueste creerlo.
El soñado Tiguan Coupé (eléctrico) ha sido sentenciado
El adiós al Volkswagen ID.5 no se adelantará en absoluto, sino que seguirá su camino hasta un momento de mediados de 2027, en el que supuestamente debería estrenarse su relevo, cosa que no hará. Un importante cambio en la estrategia y muy lógico, del que la firma por fin se ha dado cuenta de la inutilidad de mantener modelos a la venta que no producen beneficios.
La importante decisión es consecuencia de la crisis que vive Volkswagen, que necesita desprenderse de este tipo de «rémoras», por lo que el ID.5 se despedirá definitivamente, si es que a última hora no se produce un nuevo cambio en el guion como con el Touareg. El futuro de Volkswagen es el de atraer a un público más amplio, también con sus modelos de mayor tamaño, pero siempre centrados en los más rentables.
