Verstappen, enfurecido tras perder el podio: "Todo por un comisario idiota"

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Publicado: 23/10/2017 00:20

El joven talento de Red Bull afrontó la salida del Gran Premio de Estados Unidos desde la decimosexta posición, debido a que tuvo que reemplazar forzosamente varios de los elementos que conforman la unidad de potencia que alimenta su RB13, y podría haber culminado una remontada espectacular en el podio de no haber recibido una de las sanciones más polémicas en lo que va de temporada.

“Recibir esta sanción es algo realmente malo, creo que los aficionados no lo han entendido, pero no se puede hacer nada”, comentó Max Verstappen al salir de la zona a la que acuden los pilotos que acaban en las tres primeras posiciones en carrera. “Todo el mundo se ha salido de la pista, no ha habido sanciones, y de repente en la última vuelta estás luchando por la posición, haces lo mismo y te ponen una sanción. Es muy raro, todo por un comisario idiota que toma decisiones en mi contra, como sucedió en México el año pasado. Me han puesto una sanción de cinco segundos, ¿por qué?”.

Todo el mundo se ha salido de la pista, sin sanciones, y de repente en la última vuelta haces lo mismo y te ponen una sanción

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Si bien Verstappen aseguró que “he disfrutado de la carrera”, un mensaje que dejó por radio bastante contento cuando creía tener la tercera posición garantizada por delante de Kimi Räikkönen, el neerlandés azotó a la directiva de la Fórmula 1 confesando que “en un par de años los aficionados se van a ir” si siguen teniendo lugar situaciones como la que vivieron en Austin al término de la carrera, con un piloto relegado del podio por un adelantamiento por encima de los límites.

El resultado de la investigación fue inmediato, y no se repitió lo ocurrido en el Gran Premio de México del año pasado, en el que Verstappen recibió el trofeo como integrante del podio por la noche, mucho más tarde del final de la carrera, en lugar de Sebastian Vettel. “Lo peor es que quitas a alguien del podio, creo que lo puedes decir después, me parece que es mejor para todo el mundo, ahora todo tiene una pinta de mierda, lo siento si digo palabrotas”.

“El coche ha ido bien, he hecho adelantamientos muy buenos, he estado muy seguro en las últimas carreras. Creo que hemos sido de los más rápidos, sino los más rápidos, y eso demuestra que tenemos potencial para el futuro”. Su optimismo y su saber estar predominaron más tarde por encima de las reacciones inmaduras que cabrían esperar de un piloto tan joven, con su punto de mira en la próxima cita del mundial, donde espera poder poner solución a lo acontecido hoy. “Espero no tener ninguna penalización por el motor, empezar por delante y hacer un buen trabajo”.

Verstappen opinó que la sanción “es injusta, y creo que muchos estarán de acuerdo conmigo”, aunque el #33 prefiere olvidar el tema y mirar hacia adelante. “¿Qué puedes hacer? Es su decisión, no puedes quejarte sobre ello y ha sido muy raro, pero el coche ha ido muy bien y todo el mundo se ha salido de pista sin sanciones, incluso cuando he luchado con Bottas él se ha salido de pista, luego le he tenido que volver a adelantar y no le han sancionado, y luego en la última vuelta estoy luchando con Kimi y de repente a mí sí me penalizan. Igual debo de parar de hacerlo; es lo que les gusta”.

El equipo está con él

Horner se mostró claramente enfadado ante los micrófonos de los medios nada más conocerse la decisión final.

El jefe de la escudería de la bebida energética hizo unas declaraciones a Sky Sports F1 que iban en la línea de su pupilo, alegando que sus rivales habían hecho lo mismo en repetidas ocasiones y no había sucedido nada similar. “Ha habido coches que se han salido en todo el día y no han emprendido ninguna acción, así que creo que penalizar a Max es excesivamente riguroso”, afirmó Christian Horner.

“Se han equivocado, le echaremos un vistazo, pero para mí fue legal, competición al límite. Creo que ha sido una mala decisión de los comisarios”. Para echar más leña al fuego, el propio padre de Max Verstappen publicó varios tweets en contra de la organización, algo que sin duda demuestra el enfado mayúsculo hacia la FIA por un adelantamiento que hizo levantar a la grada en los instantes finales de la carrera.