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GP Malasia[Vídeo] GP F1 Malasia 2012: Sauber y Pérez acarician la victoria

No por primera ni última vez, la lluvia fue protagonista en Malasia en 2012. Fernando Alonso sacó partido del caos para apuntarse una inesperada victoria. El otro gran protagonista fue Sergio Pérez, que estuvo muy cerca de dar a Sauber el primer triunfo como constructor independiente.

4 min. lectura

Publicado: 27/09/2017 19:30

Alonso, con Pérez a sus espaldas, celebra su tercera victoria en Sepang. Foto: Wikimedia Commons.

Sauber cumple este año un cuarto de siglo en la Fórmula 1, y lo hace como el equipo más débil del campeonato. Ello se debe en buena medida a la desaparición de otras escuderías a lo largo de los últimos años. Porque, desde su debut en el Gran Premio de Sudáfrica de 1993 (donde puntuó gracias al quinto puesto de Jyrki Jarvilehto), la formación suiza siempre se desenvolvió con solvencia en la zona media de la parrilla, con ocasionales apariciones en los primeros puestos. Así lo atestiguan un total de diez podios y el brillante cuarto puesto en constructores de la temporada 2001.

La victoria, sin embargo, les ha sido esquiva, pues no hay que contabilizar la lograda por Robert Kubica en el Gran Premio de Canadá de 2008, cuando el equipo estaba bajo el control de BMW. Pero cuatro años después, Sergio Pérez -en su segunda temporada con el equipo- estuvo a un paso de hacerse con un sensacional triunfo en el Gran Premio de Malasia.

Noveno en la parrilla, justo por detrás de Fernando Alonso, el mexicano fue el primero en cambiar a neumáticos full wet cuando la lluvia arreció nada más darse la salida. Ello le permitió alzarse hasta la cuarta plaza cuando las condiciones obligaron a interrumpir la carrera con bandera roja. Casi una hora después, se reanudó la acción. Con mucha menos agua en el asfalto, se produjo un carrusel de paradas en boxes para montar intermedios del que Alonso y Pérez emergieron en cabeza.

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El segundo puesto en Sepang sigue siendo el mejor resultado de Pérez en la F1. Foto: Wikimedia Commons.

Aun así, con solo 16 vueltas consumidas, parecía que Lewis Hamilton, tercero, tenía todos los ases en la manga para recuperar la primera posición perdida por un lento pitstop. Pero poco a poco se hizo evidente que no iba a ser así. En la vuelta 30, la ventaja de Pérez sobre el McLaren había pasado de seis a más de quince segundos. No sólo eso: conforme la pista se fue secando, Sergio comenzó a recortar la desventaja con Alonso hasta situarse a poco más de un segundo.

El español montó neumáticos de seco en la vuelta 40. Pérez lo hizo una después y regresó a la pista a siete segundos, debido en buena parte a una lenta puesta en acción de su C31. Para más intriga, había optado por el compuesto duro, mientras que Ferrari había elegido el medio. Poco a poco, Sergio volvió a limar las diferencias. A medio segundo de Alonso con seis vueltas por delante, parecía que la gran sorpresa estaba servida. Pero el mexicano cometió un error en la curva 14, se salió de la pista y concedió al español el aire necesario para cruzar la meta como ganador.

Un mensaje de radio de Sauber (“Sergio, ten cuidado, necesitamos esta posición”) generó cierta polémica. Sin sentido: si de verdad fue una orden encubierta para no poner en peligro la victoria de su suministrador de motores, ¿por qué se molestó Checo en remontar de nuevo? En cualquier caso, ese segundo puesto sigue siendo a día de hoy el mejor resultado tanto del mexicano como del equipo suizo.

Fotos: Wikimedia Commons

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