Europa inaugura la planta que cambiará el futuro del reciclaje de baterías
Re.Lion.Bat Circular ha inaugurado recientemente unas instalaciones que ya son consideradas la fábrica de reciclaje de baterías de coches eléctricos en Europa. Una gran noticia que ayudaría a reducir nuestra dependencia de China, pero todavía hay muchos retos pendientes.

Europa tiene un gran reto ante sí en los próximos años: hacer crecer su industria del vehículo eléctrico y reducir su dependencia de las empresas chinas. La última gran reunión entre la jefa de la Comisión Europea con las marcas ha permitido debatir el camino a seguir.
Y es que Europa tiene una gran desventaja frente a los competidores chinos, que llevan ya muchos años trabajando para el desarrollo de coches eléctricos y baterías. Especialmente preocupante es este último apartado, ya que las empresas del gigante asiático dominan con mano de hierro la cadena de suministro de baterías y materias primas.
Nuestra región no solo debe ponerse al día en el desarrollo de este tipo de vehículos, también en la producción local de baterías. Y más allá de eso, intentar independizarse todo lo que pueda de la dependencia en materias primas. En este sentido, el reciclaje de baterías se antoja vital.

La fábrica europea de referencia en reciclaje
Ha sido inaugurada recientemente en Alemania, concretamente en Meppen, al norte del país, la que es considerada ya la mayor fábrica de reciclaje de baterías de toda Europa. La ha abierto Re.Lion.Bat Circular, que cuenta ya con tres amplios almacenes en las que recibir toneladas de material diario y recuperar materias primas valiosas de baterías usadas.
No es una fábrica cualquiera: acaba de empezar a operar y ya representa un tercio de la capacidad total de Alemania en este campo, con una capacidad de procesamiento a pleno rendimiento de 60.000 baterías al año.
Tras invertirse 30 millones de euros en su levantamiento, esta fábrica puede reciclar cuatro toneladas de baterías por hora y, cuando esté a plena capacidad, esperan poder llegar a las 30.000 toneladas al año. Gracias a su procesamiento, pueden recuperar hasta el 96 por ciento de las materias primas, incluyendo aluminio, cobre, plásticos e incluso la masa negra.

Esta última, parecida al polvo fino del carbón, es vital para la producción de nuevos materiales para baterías, ya que contiene litio, níquel y cobalto, elementos esenciales. Sin embargo, este procesamiento se lleva a cabo en Asia o Norteamérica, aunque hay varios proyectos en Europa para llevarlo a cabo, incluido en España.
Re.Lion.Bat recibe las baterías de iones de litio, entre 4 y 5 camiones diarios, y se descargan a fondo en un primer término. Tras pasar por una cinta transportadora hasta la planta, situada a un metro de altura, se terminan triturando, tamizando y descomponiendo en sus materias primas a través de diferentes procesos.
Cuentan con avanzados sistemas integrales de seguridad, pensados para evitar que las baterías almacenadas puedan acabar en combustión espontánea. Son las cámaras termográficas las encargadas de controlarlas desde que llegan en los camiones hasta que pasan por los almacenes y las áreas de almacenamiento.
Los dispositivos de medición controlan además el contenido de nitrógeno en las instalaciones y, en caso de necesidad, hay preparados los sistemas de rociadores con agentes extintores especiales.

Las dificultades de la situación en Europa
Como decíamos antes, los retos en este campo son mayores. Hay muchos proyectos en marcha para levantar nuevas fábricas de reciclaje en todo el continente europeo. Sin embargo, el volumen de baterías al final de vida útil todavía no ha crecido lo suficiente para que todos estos proyectos salgan adelante.
La inversión tecnológica necesaria, las autorizaciones pertinentes, la presión desde China… están impidiendo que el sector crezca como es debido. «El objetivo es establecer una economía circular europea para conservar las materias primas que se encuentran en Europa», asegura el director general de la compañía alemana, Christoph Spandau.
El hito es, a día de hoy, mayúsculo, con la capacidad de procesamiento de 30.000 toneladas al año en su inicio que se puede duplicar en el futuro. Pero para que te hagas una idea, CATL en China está trabajando en un parque industrial capaz de procesar unas 500.000 toneladas anuales; es decir, unas 8-16 veces más de lo planeado por Re.Lion.Bat.
Fuente: ndr.de

