«Apostarlo todo al coche eléctrico será un fracaso», el aviso de Ineos sobre el desastre que se avecina en Europa
La marca de todoterrenos Ineos lleva sorprendiendo al mercado desde que llegó. Se abre a un futuro electrificado, aunque sus directivos creen que las baterías de manera exclusiva es una forma de muchas que tendrán que cohabitar.
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Publicado: 19/09/2023 14:00
La estrategia de quedarse solo en vehículos eléctricos de batería está destinada al fracaso. Esto es lo que afirma Lynn Calder, la CEO de la marca Ineos. Piensa que quedarse solo con ese tipo de propulsión no es más que arrojarse a un abismo. Es por ello que la encargada de liderar a su compañía, aboga por la adopción de diferentes tecnologías, adecuadas según el tipo de vehículo al que atienda.
Únicamente baterías, no
En una conferencia de la Society of Motor Manufacturers and Traders (SMMT) centrada en la electrificación, Calder expresó su preocupación sobre el tema. La dependencia en exclusiva de los vehículos eléctricos de batería (VEB) no pueden ser la solución única para alcanzar los objetivos de reducción de carbono en su país, Reino Unido, pero esto se puede hacer extensible a otros territorios. Insistió en que se requiere una combinación de tecnologías para alcanzar estos objetivos de manera efectiva.
«Hablamos continuamente sobre los vehículos eléctricos, y creo que esto puede ser peligroso. Necesitamos diversidad y un plan estratégico sólido. Si simplemente optamos por los vehículos eléctricos como la única solución para el Reino Unido, corremos el riesgo de fracasar y de incurrir en costos significativos», afirmó Calder ante los asistentes a la conferencia.
Los políticos quieren coches eléctricos de batería
Sin embargo, sus palabras encontraron respuesta en voz de Richard Bruce. El director de Descarbonización del Transporte en el Departamento de Transporte argumentó que apostar por más de una opción de combustible «puede utilizarse como excusa para la inacción», debido a la falta de claridad en las políticas.
De paso afirmó que «dada la actual línea de tiempo, los VEB tienen una ventaja clara. Si contamos con alternativas de combustibles disponibles, debemos emplearlos en otros segmentos del mercado donde las baterías no sean tan viables, como la aviación».
Carlos Rodrigues, el director de Renault Trucks, respaldó esta postura. Insistió en que los vehículos eléctricos con batería deberían ser la primera elección, especialmente en el sector comercial. En cuanto al hidrógeno, tecnología en la que Ineos ya ha dado algunos pasos, debería reservarse para situaciones en las que problemas como el peso limiten la eficacia de las baterías.
«Si evaluamos indicadores como el NOx (óxido de nitrógeno) y su impacto general, los VEB son, con mucho, la mejor opción, especialmente en comparación con el hidrógeno», añadió. «Es importante aclarar que aunque el hidrógeno es una opción, no es la opción predilecta».
La directiva de Ineos respaldó su posición al enfocarse en aquellos que trabajan en regiones remotas, como algunos compradores del Ineos Grenadier, un vehículo que solo se vende con motores de gasolina o diésel. «Creemos que existen casos de uso específicos para diferentes tecnologías en distintos tipos de vehículos», afirmó. «Hay vehículos que no se adaptarán bien a la electrificación. Pensamos que el nuestro es uno de ellos, ya que se utilizará en tareas que implican remolcar cargas pesadas, trabajar en condiciones extremas y transitar por terrenos difíciles y remotos».
Una voz española
El valenciano Agustín Martín, director de Toyota UK, coincidió con Calder y declaró en la conferencia: «Si el objetivo es reducir el carbono, no podemos depender exclusivamente de una sola tecnología. La variedad nunca puede ser perjudicial». Toyota es una de las pocas compañías automovilísticas que no se ha lanzado en plancha hacia lo eléctrico, y tienen una estrategia en la que anteponen los híbridos, a lo puramente eléctrico.
El directivo español amplió su perspectiva al señalar que «no todas las regiones del mundo están al mismo nivel de preparación», y explicó que algunos países aún no están listos para adoptar vehículos eléctricos, lo que podría requerir la consideración de alternativas.
«Debemos aplaudir todos los esfuerzos dirigidos a reducir las emisiones de carbono», concluyó. «Cada reducción es un paso en la dirección correcta para construir un futuro más sostenible».
