El futuro del Mercedes Clase G se aclara tras el giro que Europa está reconsiderando
Mercedes está despejando el horizonte de algunos de sus modelos. La marca alemana sabe que fue un error impulsar determinados modelos hacia los eléctricos, y el Clase G es uno de ellos. El todoterreno sigue teniendo futuro en el mundo de la combustión; como mínimo, casi una década más.
Mercedes, como la gran mayoría de los fabricantes, están obligados a realizar planes de futuro sobre sus modelos actuales, tomando decisiones de estirar por más o menos tiempo la producción en serie o prescindir de ellos. Pero, ahora que Europa se está pensando muy seriamente dejar sin valor esa idea de imponer los coches eléctricos, y que ha venido persiguiendo desde años, los de la estrella están divisando un horizonte mucho más claro, y que no les obligará a dar un paso al lado con algunos modelos.
El longevo todoterreno de Mercedes era uno de los que tenía grandes posibilidades de abandonar el catálogo, pero acaba de saltar una importante noticia que afecta de lleno al Clase G de combustión. La marca de lujo ha probado suerte transformando al exitoso todoterreno lanzado en 1970 en un coche eléctrico, y la realidad no puede estar siendo más cruel para él. A pesar de que sus entrañas son todo un compendio de tecnología, con características técnicas nunca antes vistas, como poder girar sobre su propio eje y darse la vuelta como por arte de magia, los clientes no aprecian semejantes cualidades y el Clase G eléctrico es hoy un desastre comercial.
El futuro del Mercedes Clase G está asegurado por casi 10 años
Está claro que Mercedes se ha adelantado demasiado a los tiempos, y que el Clase G eléctrico pasará, por ahora, a los anales de la historia del fabricante, porque se ha abierto un período completamente nuevo y el todoterreno de combustión podrá seguir a la venta. Mercedes no lo ha comunicado oficialmente, un privilegio que le ha regalado a su socio de Magna y que, según fuentes alemanas entendidas en la materia, ésta confirmará en los próximas semanas.
Y es que las dos empresas han renovado el acuerdo que mantienen desde la década de los años 70, y en el que la casa austriaca se encarga de la producción del todoterreno en su fábrica de Graz. La misma instalación en la que se fabricará el exclusivo Mercedes Clase G Cabrio anunciado hace unos días, una variante de carrocería que se sumará a la del cinco puertas que, desde su lanzamiento, se han producido nada menos que 600.000 unidades.
El futuro del Clase G más allá de 2035 sigue dependiendo de Europa
Ahora, las dos empresas han garantizado continuar con este importante éxito, en un principio, por los próximos nueve años, por lo que el Clase G se seguirá fabricando hasta 2034. La oficialidad de esta gran noticia que asegura una importante carga de trabajo para los empleados de Magna en Austria será confirmada, previsiblemente, a finales de diciembre.
Mercedes y los sucesores de la antigua Magna Steyr revisarán este nuevo contrato cuando se aproxime su finalización, pues hasta hace poco tiempo, la intención era la de extender la producción hasta 2039, cinco años más de lo que se ha firmado. Un tiempo que podría ampliarse, aunque todo depende de las futuras decisiones de Europa sobre la combustión. Si, finalmente, los combustibles sintéticos son autorizados, está claro que habrá Mercedes Clase G para mucho tiempo.
