La fábrica de Nissan en Ávila producirá carrocerías y recambios después de camiones

Vista aérea del Polígono Industrial de Las Hervencias en la actualidad

La fábrica de Nissan en Ávila no es tan conocida como la de Barcelona, pero está asentada en la ciudad castellanoleonesa desde hace más de 60 años. Es una de las escasas empresas que realiza actividades industriales de envergadura en toda la provincia. Su posible cierre sería un cataclismo para la ciudad.

Ayer viernes los responsables de la Alianza Nissan Renault presentaron a los trabajadores su idea para mantener todos los empleos cuando cese la producción de los camiones ligeros NT-400 y NT-500. Eso ocurrirá en 2019, cuatro años antes de lo previsto, ya que dejará de ser un modelo viable.

En la última actualización de producto, los camiones NT pasaron a cumplir Euro 5+, pero deberán actualizarse a Euro 6 en septiembre de 2019. Nissan considera que no será rentable la inversión necesaria para que los motores respeten el estándar más moderno. Por lo tanto, la producción terminará. ¿Y qué hará la fábrica entonces?

Vista aérea del Polígono Industrial de Las Hervencias en 1959 - Fuente: El Norte de Castilla

A partir del cese de fabricación, la factoría recibirá una inyección de 40 millones de euros para reconvertirla en un centro de producción y distribución de piezas de carrocería. Bajo este enfoque no hay otras plantas de la Alianza en ningún otro lugar del mundo. Los casi 500 trabajadores mantendrían sus empleos más allá de 2020, eso sí, aceptando el marco laboral de Renault, menos favorable que el de Nissan.

Esta asignación no afecta -para mal- ni a las dos plantas de Valladolid ni a la de Palencia, todas trabajando para Renault en exclusiva. Para realizar el anuncio se desplazaron a Ávila José Vicente de los Mozos, responsable de la alianza Nissan Renault en España, y Alan Johnson, vicepresidente de las operaciones industriales de Nissan en España.

Por otro lado Confae, la Confederación Abulense de Empresarios, ha pedido a Nissan que ofrezca un plan más ambicioso para que no afecte a los proveedores. En otras palabras, la solución de Nissan garantiza los empleos directos, pero no los indirectos, unos 300. El Gobierno de Castilla y León apoya la decisión del fabricante y la oposición la ha criticado.

Un poco de historia: desde Fadisa hasta hoy

Como en otras tantas aventuras industriales de la España franquista, se tiró del talento ajeno para poner en marcha la industria nacional. Fadisa -Fabricación de Automóviles Diésel, S.A.- se levantó para producir furgonetas de origen Alfa Romeo. La planta fue operativa en 1959 con una producción muy escasa, como cuenta el NO-DO.

Las opciones de motorización eran dos, o un motor de gasolina del Alfa Romeo Giulietta o un diésel atmosférico Perkins con el que podía alcanzar los 85 km/h y gastar tan solo 7 l/100 km (no es mal dato ni siquiera hoy). Las furgonetas adoptaron múltiples formas, incluyendo microbuses.

La época Fadisa-Romeo llegó a su fin en 1967, cuando se hace cargo de la planta Motor Ibérica, que nos sonará mucho por sus camiones Ebro. Fue una cabeza de puente para el establecimiento de Nissan en Europa. Su primer producto, el Ebro F100, está muy basado en la furgoneta Fadisa Romeo 2.

Nissan NT-400 (modelo 2014)

Le siguieron las series Ebro F108 y F hasta 1976. Poco después Fadisa se convirtió en parte de Nissan en su totalidad. La época de los 80 fue la más exitosa de la planta, con una plantilla de unos 1.200 trabajadores, de los cuales eran todos fijos. También ha producido camiones Renault basados a su vez en los Nissan.

En el último año fiscal se han producido 14.823 unidades del camión ligero NT-400 Cabstar y NT-500. La plantilla es de menos de la mitad de gente que tenía en su mejor momento, cuando las Nissan Trade salían una tras otra de la cadena de montaje. La caída en la actividad presagiaba un final amargo para la fábrica.

Pero llegó esta noticia que dará futuro a la vieja "Fadisa" -como la llaman los lugareños- durante una buena temporada. Las necesarias ampliaciones de la fábrica para el futuro, una nueva nave de estampación y los almacenes de piezas, serán sufragadas por la Junta de Castilla y León. Posiblemente había soluciones mejores, pero esto es mejor que nada.