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Prueba Hyundai i30 CW 2017, la familia crece

Hyundai apuesta por el segmento de los compactos. El i30 hace poco ha cambiado de generación, y ahora se convierte en una navaja suiza que dará servicio a multitud de opciones. El último en llegar ha sido el Hyundai i30 CW que ya hemos probado.

Prueba Hyundai i30 CW 2017, la familia crece

15 min. lectura

Publicado: 23/06/2017 09:00

El i30 CW luce la parilla que ya se ha convertido en seña de identidad de la marca

El concepto de familiar puede abarcar un gran abanico de posibilidades. Aunque solemos pensar en el aspecto más grande del término. Sin embargo no hace falta irse a los extremos para encontrar el espacio, la versatilidad y la habitabilidad que esperamos de un modelo del segmento. Hyundai sabe bien esto y aprovechando la completa renovación de la familia i30, nos presenta ahora el más familiar de ellos, el Hyundai i30 CW 2017 que ya he podido probar.

En su momento ya tuve ocasión de probar el nuevo Hyundai i30. Lo hice en su presentación internacional, y allí ya me di cuenta del radical cambio que está sufriendo la marca coreana. En pocos años ha pasado de fabricar coches baratos y simples a fabricar modelos como este. El salto en todos los aspectos es brutal, y por supuesto el CW se aprovecha de ello.

Por supuesto el salto más evidente salta a simple vista. El diseño del Hyundai i30 ha cambiado con respecto a su predecesor. Por decirlo de alguna manera se ha suavizado y europeizado. Personalmente su nuevo estilo me gusta, me parece que los coreanos han sabido crear un buen equilibrio en el diseño aunque un poco soso. Eso sí, la trasera me recuerda mucho a la de otro modelo, a uno de la familia, al Kia Optima Sportswagon. Un aire se dan.

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Y es que la principal diferencia con el modelo compacto es el alargamiento del voladizo trasero. El CW es 24 centímetros más largo que su hermano. Como ya digo el resto de cotas quedan sin alterar, incluida la batalla, por lo que en ambos casos se ofrecen las mismas características de habitabilidad, salvo la importante ganancia de espacio de maletero, que pasa a ser de 602 litros como mínimo, llegando a un máximo de 1.605 si abatimos la segunda fila de asientos.

El portón deja paso a 602 litros de capacidad de maletero. Un dato sensacional

Hyundai se está volviendo cada vez más europeo. La marca tiene aquí un importante centro de desarrollo, y sabedores que nuestro continente es el más exigente en cuanto a calidades, el i30 luce un interior acorde a un público muy detallista. De puertas para dentro el Hyundai i30 CW cuenta con el mismo espacio que ya conocíamos, incluyendo la calidad y la tecnología.

Es aquí donde más se nota el salto con respecto a la generación pasada. La elección de materiales es correcta, al igual que la forma en la que éstos se han ensamblado. La sensación al tacto es muy buena. Casi todo lo que es habitual tocar está hecho de un material cálido, suave y bien acabado, aunque es inevitable que aparezcan plásticos más burdos, pero sin lugar a dudas son los mínimos y no afectan a la sensación interior.

Hyundai ha cuidado hasta el más pequeño de los detalles a la hora de crear la variante más familiar del i30

Esa sensación se extiende gracias al espacio interior. La nueva generación, sobre todo la nueva plataforma permiten aprovechar mejor el espacio interior. Cinco ocupantes pueden viajar de forma cómoda, aunque el quinto deberá soportar las inclemencias de una plaza más estrecha. Pero la calidad de rodadura y la suavidad son la tónica habitual de los viajes. Lo que sí podría mejorar es la insonorización interior, que como ya pasara con el compacto, podría ser mejor.

En el apartado mecánico tampoco puedo contar novedades, por el sencillo motivo que no las hay. La oferta sigue siendo la misma, salvo alguna excepción, a la que ya conocimos en el momento del lanzamiento. El i30 CW emplea exactamente los mismos motores y transmisiones. Es decir que la oferta abarca motores gasolina de tres y cuatro cilindros con 120 y 140 caballos. En la rama diésel la oferta siempre será de motores tetracilíndricos con potencias de 110 y 136 caballos.

La pantalla del cuadro es opcional, aunque no la seguridad. Cargado desde las bases

En cuanto a las cajas de cambios, los modelos más básicos solo estarán disponibles con transmisiones manuales de seis velocidades. Solo las versiones más potentes de ambos combustibles son capaces de ofrecer una transmisión de doble embrague DCT con siete velocidades. En todos los casos la potencia se transfiere al eje delantero.

La tecnología es un factor de compra muy importante a día de hoy. Que un modelo sea capaz de ofrecer importantes avances puede resultar clave para su buen devenir comercial. La nueva familia i30 es capaz de disponer de mucho más de lo solemos estar acostumbrados. Hay tres niveles de equipamiento: KLASS, TECNO y Style. Según vamos subiendo en el escalafón encontraremos más y más gadgets, y sobre todo asistentes a la conducción que amplían la seguridad de los ocupantes.

Hyundai quiere convertir al i30 Wagon en un superventas, y para ello ha reducido la diferencia de precio que lo separa con la unidad de cinco puertas. En la anterior generación el exceso era de 1.200 euros, pero para este caso el i30 y el i30 CW estarán separados por apenas 690 euros. El precio de salida del Hyundai i30 CW se sitúa en los 22.365 euros. Es un precio sin campañas de ningún tipo, aunque habrá una de lanzamiento que podrá llegar a suponer un ahorro de hasta 4.000 euros.

De puertas para dentro el i30 CW luce una gran calidad de acabados y de materiales

Prueba Hyundai i30 CW 2017

Hyundai está sentando las bases de cara a un futuro prometedor. Los coreanos se han marcado como objetivo para el 2021 ser la marca asiática más deseada en Europa. El reto es severo, y para ello se apoyará en unas firmes bases que son el i30, el Tucson y el más moderno de todos, el Hyundai Kona que recientemente hemos podido conocer de primera mano.

Conseguir ese reto supone vender muchos coches, y obviamente estos tienen que ser buenos. Hay que reconocer que Hyundai lleva tiempo haciendo muy bien las cosas, y de hecho el Hyundai Tucson ya está dando más de una alegría en el segmento SUV, llegando a superar en ventas mensuales al todopoderoso Qashqai. El i30 es un claro ejemplo del camino que quiere seguir la marca, y si resulta vistoso, tecnológico y bien acabado, no menos interesante resulta su conducción.

La seguridad toma un papel importante, y por ello el i30 CW luce una amplia variedad de asistentes y seguridad activa

El hecho de que la compañía esté europeizando sus modelos se nota principalmente en cuanto a conducción y dinámica se refiere. El público europeo busca confort y calidad por encima de otros factores. Por ello el i30 luce una configuración que propicia estas dos cualidades. Y hay que reconocer que si te tapan los ojos, muchos no dirían que están a bordo de un Hyundai. El trabajo de refinamiento ha sido muy grande.

Pero no por ello se han olvidado de aportar cierto toque picante. No podemos olvidar que habrá una versión radicalizada del i30. El Hyundai i30 N empleará la misma plataforma, y ésta tiene que aguantar muchas fuerzas. Por eso el Wagon va tan sobrado de chasis. Es un coche con un buen grado de dinamismo y agilidad, y en eso ayuda enormemente la carrocería más rígida y ligera, y la nueva suspensión trasera que por fin pasa a ser de estilo MultiLink.

El i30 CW muestra mucho espacio para su reducido tamaño. Aprovechamiento máximo

Con estos cambios el i30 CW se comporta de una forma muy agradable. De hecho si comparo la versión de cinco puertas con esta, puedo notar un ligero punto extra de confort en la versión familiar. La suspensión absorbe perfectamente las ondulaciones y rugosidades del terreno, a la vez que sujeta bien al coche en el vértice de la curva. Ojo, no es un coche para irse de tramo, pero su carácter es más dinámico del que uno podría pensar.

Los motores también ha sido puestos al día, y eso implica que no solo su consumo se ha bajado, durante la presentación no hubo tiempo a verificar los datos de fábrica, sino que también lo ha hecho la suavidad de los mismos. Tanto los bloques de gasolina como diésel presentan un comportamiento muy lineal y progresivo. La entrega de potencia es suave, y fuera de los rangos óptimos de par no acusan una excesiva pereza.

La configuración de las transmisiones ayuda a mantener a raya los consumos, generando una conducción suave y eficiente. Si bien pocas pegas, por no decir ninguna, se le pueden poner al cambio automático de doble embrague, el cambio manual se me antoja un poco tosco en sus movimientos. La transferencia entre relaciones podrían ser mejores, lo mismo que la holgura de la palanca. No afea la conducción, pero que de haberlo rematado mejor la sensación global sería mucho mejor.

La cantidad de equipamiento puede ser muy alta

De todos modos el i30 CW tiene un marcado carácter rutero. Un devora kilómetros en toda regla. Ya lo comenté en la presentación del i30; no llega a ser tan bueno como un Volkswagen Golf, la referencia del sector, pero sin lugar a dudas Hyundai ha conseguido reducir la brecha que lo separaba. Si la unidad N sigue esta progresión puede que estemos ante una joya del segmento, pero tiempo al tiempo porque hasta otoño no llegará.

Conclusiones

Hyundai ha tomado carrerilla. De un tiempo a esta parte los coreanos están renovado y ampliando su flota de modelos. El denominador común de todos ellos es el acercamiento a las marcas europeas. En algunos casos se quedan un poco por detrás, pero en muchos otros han tomado la delantera. La familia i30 es un pilar básico de la compañía, y por ello su polivalencia estará fuera de toda duda gracias a cuatro modelos diferentes. Primero llegó el compacto, y ahora la versión familiar de este, el Hyundai i30 CW que resulta igual pero mucho más práctico.

Todo se ha vuelto más europeo en Hyundai, desde el diseño, hasta la calidad, pasando por la conducción y la tecnología. El i30 CW 2017 es mucho más refinado que su predecesor, con una rodadura de alta calidad y un comportamiento muy suave. El equilibrio es muy correcto, aunque en el familiar Hyundai ha apostado de forma más clara por el confort que por el rendimiento puro y duro. Pero no hay mayor problema, es algo lógico y que no echa para atrás. A fin de cuentas si queremos más sensaciones deportivas en un futuro tendremos el Hyundai i30 N con sus casi 300 caballos.

Hyundai espera llegar al 20% de ventas en la carrocería Wagon

Opiniones del Experto
Nos ha gustado
  • Comportamiento
  • Volumen de maletero
  • Relación calidad-precio
Nos ha gustado menos
  • Cambio manual brusco
  • Diseño conservador
ValoraciónNota8.0
Diseño7
Equipamiento9
Habitabilidad9
Confort8
Comportamiento8
Prestaciones7
Seguridad8

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