TVR, al borde de la desaparición: ocho años después, el Griffith V8 sigue siendo un sueño roto
Se llama Griffith V8 y estaba llamado a ser uno de los superdeportivos británicos de nueva hornada, pero no va a ser posible. La firma se encuentra en una delicada situación, una más en su historia y esta puede ser la última. Una muerte prácticamente anunciada, y solo un milagro imposible la podría salvar.

Casi que debería haber llegado al mercado hace años, pero las circunstancias no han sido las más idóneas para ello, y es muy posible que el Griffith V8 se quede solamente en un sueño, permaneciendo en las retinas de sus creadores por mucho tiempo. Las cosas no están en la firma británica como para que este superdeportivo tan elegante como sofisticado, con cierto aire retro vea la luz de los grandes focos que merece.
TVR está en serio peligro de extinción y casi que ni un milagro podría devolverla a la vida para competir con algunas de prestigio alemanas o italianas. La situación se ha vuelto más complicada en los últimos meses, enfilando una crisis continuamente con otra desde que el fabricante ingresó en este nuevo siglo. Fundada en 1943, TVR llegó a contar con una serie de modelos que han sido ampliamente aclamados, llegando a un año 2012 en el que todo empezó a torcerse.
El TVR Griffith V8 llegó a asustar por momentos a Porsche.
El Griffith V8, camino de quedar para el recuerdo
Tanto, que su dueño acabó por darse por vencido después de grandes esfuerzos por sacar la marca adelante. Por supuesto, se encontró a un nuevo inversor, un apasionado que decidió crear un nuevo Griffith a partir de una plataforma de un experto compatriota británico como Gordon Murray. Su división de tecnología servía la avanzada plataforma «iStream» para un total de 500 ejemplares que tenían hasta precio: aproximadamente, 135.000 euros.
Las previsiones eran tan positivas que incluso se sentaron las bases para renovar las instalaciones fabriles que disponían en Gales, aunque este extremo no llegó a materializarse ya que el interés de los inversores se había enfriado. Una vez más, estos encontraron a otros interesados en el proyecto pero, al tratarse de un fabricante de baterías como Ensorcia Automotive, estos exigieron la producción de coches eléctricos.
Crónica de una muerte anunciada, TVR está casi desaparecida
Si TVR no estaba en condiciones de fabricar un modelo de combustión, cómo estarlo para deportivos de cero emisiones con todo lo que conlleva a nivel ingenieril. Nada le ha salido bien a TVR, ni tan siquiera el plan de Gordon Murray, porque la plataforma iStream fue cancelada cuando la empresa fue adquirida por una subsidiaria de McLaren
El último director ejecutivo de TVR, Jim Berriman, renunció a su cargo el pasado mes de mayo, y la desaparición del panorama automovilístico actual está mucho más cerca de lo que parece. Ocho años después del que se suponía que era el último gran resurgimiento, cuál ave fénix, TVR está condenada a desaparecer, especialmente por un hecho: y es que ni siquiera se han preocupado de enviar a tiempo el informe anual de 2024 a las autoridades británicas.