Bobina de encendido: qué es y cuándo cambiarla
La bobina de encendido es crucial en el sistema de encendido del motor, transformando la energía de la batería en pulsos eléctricos. Descubre su función y cuándo es necesario sustituirla para mantener el rendimiento óptimo del motor.
Existen muchos modelos en el mercado que utilizan bobinas de encendido que cuestan poco más de 20 euros, pero sin ellas el vehículo no puede funcionar.
En este artículo, te desvelaré por qué la bobina de encendido es fundamental para el funcionamiento del motor, y cómo un mal funcionamiento puede afectar al rendimiento y la eficiencia del vehículo.
Qué es una bobina de encendido
La bobina de encendido de un motor de combustión interna convierte la energía eléctrica de la batería del vehículo en pulsos de alta tensión necesarios para crear la chispa que enciende la mezcla de aire y combustible en la cámara de combustión.
Dicho de otro modo, la bobina de encendido está conectada a la bujía de encendido, por lo que es la responsable de generar la chispa de esta mediante inducción magnética.
Tipos de bobina de encendido
Clásica: se trata de una única bobina que proporciona corriente a todas las bujías a través de la tapa del distribuidor.
Doble: no utiliza la tapa del distribuidor para repartir la corriente de alta tensión y está compuesta de dos bobinas que alimentan a dos bujías a través de cables.
Rampa de distribuidor: al igual que la doble, tampoco utiliza tapa de distribuidor y también posee dos bobinas que alimentan a dos bujías a la vez, pero se coloca directamente sobre estas y se cambia en bloque.
Doble independiente: tiene las mismas características que la rampa de distribuidor, pero cada bobina se sustituye por separado.
Lápiz: Cada bujía tiene una bobina que se conecta directamente a ella.
Por qué y cuándo cambiar
Si la bobina está dañada, la bujía no recibe corriente y, por tanto, no se produce chispa, por lo que el motor no puede arrancar. Si cada bujía tiene una bobina y alguna de ellas falla, el coche funcionará, pero perderá potencia y suavidad al no poder funcionar los cilindros correspondientes a dicha bobina y bujía.
Para detectar si una bobina no funciona correctamente, es necesario realizar un diagnóstico, aunque también es probable que el testigo de fallo de gestión del motor se active en el salpicadero.