La gama Q2 de Audi es coronada por una versión que combina a la perfección exclusividad con deportividad. Una versión que ofrece un extraordinario punto de equilibrio entre el confort esperado de un coche destinado a uso diario y un automóvil de enfoque deportivo. Es el Audi SQ2. Un modelo que ha venido acompañando al pequeño todocamino alemán en su periplo comercial a lo largo y ancho del Viejo Continente.
El SQ2 desempeña un papel protagonista en la gama Audi. Y es que se trata del SUV deportivo más pequeño, y por lo tanto asequible, de la marca. A finales del convulso año 2020 sufrió una importante puesta a punto. Un lavado de cara a modo de actualización de mitad de ciclo que introdujo novedades en materia de diseño y, sobre todo, de equipamiento tecnológico. Una renovación que permitirá a esta generación afrontar el resto de vida comercial que le queda por delante.
Se trata de un vehículo de tamaño comedido. Mide 4,22 metros de largo. Una longitud que lo sitúa en la parte alta del competido segmento B-SUV. En su interior dispone de un total de cinco plazas. A pesar de ser muy compacto, el habitáculo es espacio. Los 2,59 metros de distancia entre ejes han sido determinantes en dicho aspecto. El maletero cubica un volumen de carga de 355 litros. Una cifra que se puede incrementar hasta los 1.000 litros en caso de abatir los respaldos de los asientos posteriores.
Está encuadrado en una categoría donde la competencia es voraz. Sin embargo, el modelo de Audi debe enfrentarse a un pequeño número de adversarios. Entre los principales rivales del Audi SQ2 se encuentra el MINI John Cooper Works Countryman. Otros modelos con los que se enfrenta el Q2, el Mazda CX-3 y el DS 3, carecen de versiones deportivas tan radicales como el SQ2.
Bajo el capó del SQ2 se encuentra un motor de gasolina de 2.0 litros TFSI con cuatro cilindros. Un bloque que desarrolla una potencia de 300 CV y 400 Nm de par máximo. Está asociado a una caja de cambios automática S tronic de doble embrague y siete velocidades y un sistema de tracción integral quattro. Gracias a esta mecánica puede acelerar de 0 a 100 km/h en 4,9 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 250 km/h (limitada electrónicamente).
El Audi SQ2 se fabrica en Alemania. El proceso de producción en serie tiene lugar en unas instalaciones del Grupo Volkswagen localizadas en Ingolstadt. En esta planta también es fabricado el Audi Q2.