GP Miami - Carrera SprintNorris se impone en una carrera Sprint caótica por la lluvia y que acaba en desastre para Alonso y Sainz

La lluvia apareció para aportar un extra de incertidumbre a la carrera Sprint del Gran Premio de Miami. Tras una primera jornada muy calurosa y seca, las condiciones de la pista cambiaron por completo para incrementar un poco más si cabe la magnitud del reto que Andrea Kimi Antonelli tenía por delante.

El piloto italiano consiguió su primera pole en la Fórmula 1 (aunque no contará a efectos estadísticos al haberla conseguido en una clasificación Sprint), pero tener que defenderla con una pista completamente inundada iba a hacerlo mucho más complicado.

Se suspende la salida

Fue precisamente el estado de la pista lo que hizo a dirección de carrera tomar la decisión de suspender el procedimiento de salida, ya que la visibilidad era muy reducida a consecuencia de la enorme estela de agua que levantaban los monoplazas a su paso. Algo, por otra parte, muy habitual en circuitos urbanos.

A ello también contribuyeron varios incidentes causados por el aquaplaning (¿no sabes qué es? Aquí te lo contamos). Por ejemplo, la salida de pista de Max Verstappen o el choque de Charles Leclerc con el muro (este en la vuelta de salida de boxes para llegar a la parrilla) que destrozó sus dos ruedas derechas y le obligó a abandonar antes incluso de empezar.

Una vez que la lluvia paró, se reanudó la actividad en la pista y los pilotos se colocaron de nuevo en la parrilla para comenzar la carrera. En la salida, Piastri le ganó la partida a Antonelli, que incluso perdió posición con Norris y Verstappen al pasarse de frenada en la curva 1 y salirse a la escapatoria brevemente.

Más atrás, Fernando Alonso se mantenía en la novena posición, con Carlos Sainz avanzando hasta la 13ª plaza.

Piastri marca el ritmo

Con pista libre y visibilidad perfecta, Oscar Piastri lo tenía todo de cara para poner tierra de por medio, y eso es lo que empezó a hacer de inmediato. Mientras, Norris ganaba algo de margen sobre Max Verstappen, que se veía presionado por Antonelli.

Ahora bien, la pista parecía secarse con cierta rapidez, por lo que no era descartable que aparecieran los neumáticos de seco en las últimas vueltas. Mientras llegaba ese momento, Carlos Sainz adelantaba a Esteban Ocon, aunque de inmediato el francés le devolvía la jugada. Quien si conseguía ganar posición era Fernando Alonso, que superaba a Liam Lawson para colocarse octavo y, por tanto, con derecho al último punto en juego.

Las vueltas seguían cayendo y, a pesar de las complicadas condiciones de la pista, no se producían incidentes. Eso sí, Norris detenía la sangría con Piastri y se mantenía a menos de dos segundos, con Verstappen ya a cinco y Antonelli pasando de atacar al neerlandés a defenderse de su compañero en Mercedes, George Russell.

Aparece el carril seco

Con 10 vueltas completadas, comenzó a ser muy visible el carril seco en el asfalto del circuito de Miami. Por un lado, Alex Albon presionaba a Lewis Hamilton en la lucha por la sexta posición, mientras que Russell hacía lo propio con Antonelli por la cuarta. Además, dirección de carrera permitía desde ese momento el uso del DRS, por lo que los adelantamientos pasaban a ser bastante probables.

El primero en arriesgarse a utilizar neumáticos de seco era Yuki Tsunoda, que situado en las posiciones traseras no tenía nada que perder. Una vuelta más tarde, también lo hacían Hamilton, Stroll y Sainz, con seis vueltas para hacer funcionar esta arriesgada apuesta.

Verstappen, Albon y otros pilotos más retrasados apostaban también por los neumáticos de seco, mientras los McLaren comenzaban a jugarse la victoria ajenos a ello. Enseguida comenzaban a producirse sucesos inesperados. Por un lado, a Verstappen le mandaban salir de boxes cuando Antonelli entraba, golpeando al Mercedes y rompiendo su propio alerón delantero. Esto provocaba que el italiano no pudiera hacer el cambio de neumáticos, arruinando por completo su carrera.

Además, Carlos Sainz trompeaba y pinchaba dos neumáticos, al tiempo que Piastri, Antonelli, Alonso y el resto que aún no lo habían hecho paraban en boxes, quedando sólo Norris con neumáticos intermedios en el liderato. El británico se rendía en la vuelta siguiente y paraba a colocar neumáticos de seco.

Se producía en ese momento un suceso que beneficiaría y mucho al británico: Fernando Alonso sufría un accidente tras ser golpeado por Lawson y obligaba a que el Safety Car interviniera en la carrera, ralentizando a los pilotos que se mantenían en pista y permitiendo a Norris volver a pista líder de la carrera.

Tras el caos, la carrera quedaba liderada por Norris, con Piastri, Hamilton, Verstappen y Albon detrás del australiano de McLaren. Russell, Stroll y Lawson completaban las posiciones de acceso a puntos, aunque el de Williams y el de Racing Bulls fueron sancionados posteriormente por no respetar la normativa del coche de seguridad y por el accidente con Alonso respectivamente.

No dio tiempo a más, y aunque el coche de seguridad llegó a marcharse para reanudar la carrera, sólo lo hizo con tiempo para que los pilotos aceleraran por la recta y cruzaran la meta, manteniéndose las posiciones.

Tras la disputa de esta carrera Sprint, los pilotos se centran ya en la sesión de clasificación para la carrera del domingo. Esta se disputará esta noche a partir de las 22:00 horas en la España peninsular.