Motor.es

Renault admite un exceso de ambición en la renovación de su motor

  • Cyril Abiteboul considera que los problemas de fiabilidad encontrados este año provienen de una remodelación excesivamente profunda durante el invierno.
  • El máximo responsable de Renault F1 achaca muchos de los fallos surgidos durante la temporada a la inexperiencia del equipo.

6 min. lectura

Publicado: 15/08/2017 11:30

El equipo Renault cuenta con un considerable apoyo de la marca, pero las labores de reconstrucción de lo que hasta 2015 fuera Lotus aún se dejan ver en los resultados. Si bien la formación francesa ha dado un paso adelante importante esta temporada y en los dos últimos Grandes Premios el coche ha pasado a ser el líder del grupo intermedio junto con McLaren, diversos errores de todo tipo han provocado que la velocidad no se haya traducido en resultados.

Eso deja a Renault en la octava plaza provisional del campeonato de constructores y, según Cyril Abiteboul, ello es consecuencia de la falta de experiencia de gran parte del personal del equipo. “El equipo es joven, hemos tenido muchos cambios entre los mecánicos y en la fábrica. La gente está adquiriendo experiencia y, para mí, la falta de calidad es por la falta de experiencia”.

Los mayores problemas han llegado desde el motor, que ha sido remodelado casi por completo durante el invierno con miras a alcanzar el nivel de rendimiento de Mercedes y Ferrari. Pero, al igual que le ha ocurrido a Honda, el plan no ha salido del todo bien y han surgido muchos problemas de fiabilidad. “No puedo parecer profesional si te digo que fueron problemas esperados, porque no diseñamos un nuevo motor esperando que no funcionara. La realidad es que aún es algo frustrante”, comentó Abiteboul en declaraciones a Motorsport.com.

Calcula ahora el precio de tu seguro de coche

¡Infórmate!

La arquitectura del motor de combustión (ICE) es completamente distinta, el ERS es completamente distinto

Renault decidió acometer cambios en todas las áreas, no sólo para conseguir más potencia, sino para encontrar un modo más eficiente de recuperar la energía a través del sistema híbrido. “Hemos cambiado muchas cosas en lo que al motor se refiere, la arquitectura del motor de combustión (ICE) es completamente distinta, el ERS es completamente distinto. Podemos plantearnos si fue demasiado hacer todo esto en un invierno y, francamente, creo que fue demasiado”.

Los problemas mecánicos se han sumado a los errores humanos y Renault no ha recogido los resultados que la velocidad del coche merece.

Uno de los problemas más importantes residía en el recuperador de energía cinética (MGU-K), que tuvo que ser reemplazado por el de 2016 durante varias carreras, con el consiguiente lastre de peso y tamaño que eso suponía para el nuevo coche. “Cuando comienzas a tener algunas dificultades con la fiabilidad, empiezas a tener que mezclar cosas. Coges el MGU-H de un motor, el turbo de otro, el MGU-K de otro, ¡y acabas montando un monstruo!”, admitió Abiteboul.

Durante los Grandes Premios, un problema de motor suele desencadenar un cambio al completo para no perder tiempo intentando encontrar la causa del fallo y eso de manera inevitable provoca errores de montaje que desembocan en nuevas roturas. “Eso multiplica las operaciones y eso ha sido muy complicado para los chicos de los motores, que además provoca algunos errores humanos. Todo ello ha hecho que la situación haya sido incluso peor. Es un círculo vicioso muy fuerte y poderoso”.

Pero Renault no ha visto únicamente problemas de motor, sino también otros fallos mecánicos relacionados con el chasis y los sistemas auxiliares. El último y más llamativo fue el que le impidió a Jolyon Palmer tomar la salida en su Gran Premio de casa. “En lo que al chasis se refiere, también hemos tenido un par de problemas de fiabilidad. El último se produjo en la vuelta de instalación de Jo (Palmer) en Silverstone y no tuvo nada que ver con el motor. Fue un problema del sistema de asistencia y fue una gran frustración”.

En 2018 habrá mucha más estabilidad y podremos concentrarnos en extraer más potencial

En 2018, Renault deberá elevar el nivel de manera invariable ya en su tercer año completo tras la adquisición de Lotus y el quinto como fabricante del motor híbrido actual. “Será un año de consolidación en lo que al motor respecta. Habrá mucha más estabilidad y podremos concentrarnos en extraer más potencial de los diferentes componentes que hemos introducido y espero que seamos mucho más fiables”, señaló esperanzado Abiteboul.

Fuente: Motorsport.comFotos: Renault Sport F1

Compártela en:

Pixel