Los conos conectados y geolocalizados llegan a las carreteras

Coincidiendo con la primera campaña de la Dirección General de Tráfico (DGT) centrada en los tramos de obras en carretera, dicho organismo ha presentado una nueva herramienta con la que pretende reducir los siniestros relacionados con este tipo de vías.

Se trata de un cono de señalización conectado y geolocalizado, que permitirá a las empresas que trabajan en el mantenimiento y la conservación de las carreteras trabajar con mayor seguridad.

«De esta manera se aumenta tanto la seguridad de los operarios que trabajan en la carretera, como la de los conductores»

Esta medida viene impulsada por las estadísticas de siniestros en los tramos de obras. De hecho, en 2021 se produjeron 158 accidentes de tráfico relacionados con obras de mantenimiento y conservación de las vías, falleciendo dos operarios por ser atropellados mientras realizaban su trabajo.

Cómo funcionan los conos inteligentes de la DGT

Los nuevos conos están geolocalizados y desprenden destellos luminosos, permitiendo a las empresas su instalación y encendido al comenzar las tareas de las obras.

Al hacerlo, estos conos activan automáticamente una incidencia de circulación en el Centro de Gestión de Tráfico de la DGT. De manera simultánea, dicha información es compartida en tiempo real a través de la Plataforma DGT 3.0 y del Punto de Acceso Nacional, de modo que permite al conductor disponer de la información sobre la realización de obras que se va a encontrar a lo largo de su trayecto con carácter previo.

Esta información llegará al conductor bien a través de la señalización luminosa de las carreteras o de los sistemas inteligentes de los vehículos que ya admitan este tipo de interconexión.

«De esta manera se aumenta, tanto la seguridad de los operarios que trabajan en la carretera en el peligroso momento de la colocación de estas señales, como la de los conductores que van a pasar por ese punto y que podrán recibir la información a través de los paneles de mensaje variable en carretera y en sus propios coches conectados», argumenta la DGT.

La implantación y colocación de dichas señales es una de las labores más peligrosas para los operarios de carreteras, ya que constituye un elemento sorpresa para los conductores, que no han sido preavisados. Por ello, la DGT se ha propuesto aumentar la seguridad de las vías a través de «la advertencia en tiempo real de la proximidad a obras en ejecución».

Para que todo este sistema funcione correctamente, la Dirección General de Tráfico ha elaborado una Resolución. En ella define el protocolo y el formato para el envío de datos al Punto de Acceso Nacional, incluyendo la ubicación de las secciones de la vía donde se encuentran trabajando operarios.

Según datos aportados por la DGT, cada año se realizan en carretera más de 10.000 obras que generan más de 100.000 incidencias de gestión de tráfico. Es decir, cortes de tráfico, estrechamiento de carriles, desvíos, etc, que deben ser señalizados.

Fotos: DGT