Europa aprueba acabar con los coches (y furgonetas) de gasolina y diésel en 2035
El Parlamento Europeo ha aprobado la nueva legislación que pone fecha de caducidad al coche térmico en Europa. A partir del año 2035 se prohibirá la venta de coches nuevos (y furgonetas) con motores de combustión interna. El futuro del mercado europeo pasa por el vehículo eléctrico de batería y/o de pila de combustible de hidrógeno.
No ha habido sorpresa de última hora. La Eurocámara ha avalado acabar con los coches térmicos. El motor de combustión interna (ICE por sus siglas en inglés) tiene, lamentablemente, fecha de caducidad en el territorio europeo. Será en 2035 cuando entre en vigor la prohibición de la venta de coches nuevos de gasolina y diésel. No será posible matricular turismos con motor de combustión interna.
Esta decisión, que también afecta a las furgonetas (vehículos comerciales ligeros), supone no solo acabar con el vehículo tradicional de gasolina o diésel. La tecnología híbrida (MHEV, HEV y PHEV) tampoco tendrá cabida en los concesionarios que hay repartidos por el Viejo Continente. Por lo tanto, la Unión Europea se dirige a un futuro en el que solo será posible comprar coches nuevos eléctricos y/o de pila de combustible de hidrógeno.
La muerte del coche de gasolina y diésel en Europa
El Parlamento Europeo ha ratificado la medida impulsada por la Comisión Europea. La Unión Europea sigue, de esta manera, fiel a la hoja de ruta establecida de cambio al coche eléctrico. Los eurodiputados han ratificado el acuerdo al que se llegó el pasado mes de octubre entre las instituciones europeas con un total de 340 votos a favor y 270 en contra.
La nueva legislación prevé que, de cara a 2030, se deberá reducir el 55% de emisiones contaminantes de los automóviles y el 50% de las furgonetas, en comparación con los niveles de 2021. Será ya en 2035, la fecha simbólica de la que se ha venido hablando estos últimos tiempos, en la que se producirá la prohibición total para la venta de vehículos nuevos con motor de combustión interna.
También se ha señalado que, a más tardar en 2025, la Comisión Europea presentará una metodología para evaluar y comunicar datos sobre las emisiones de CO2 durante todo el ciclo de vida de los automóviles y furgonetas vendidos en el territorio de la UE. Cuando la Comisión lo vea necesario, esta metodología estará acompañada de propuestas legislativas.
No todos los fabricantes de coches térmicos se verán afectados
La denominada «Enmienda Ferrari» hará acto de presencia. Y es que no todos los fabricantes de coches térmicos se verán afectados por la nueva legislación. Los fabricantes con una producción reducida (entre 1.000 y 10.000 automóviles nuevos o entre 1.000 y 22.000 furgonetas nuevas al año) podrán beneficiarse de una exención hasta finales del año 2035. Los fabricantes que declaren menos de 1.000 vehículos nuevos al año seguirán estando exentos.
En último lugar, aunque no por ello menos importante, el actual mecanismo de incentivos para vehículos de emisión cero o de baja emisión se adaptará para ajustarse a las expectativas de venta. De 2025 a 2029, el índice de referencia de los vehículos de emisión cero o de baja emisión queda fijado en el 25% para las ventas de automóviles nuevos y en el 17% para las furgonetas nuevas. A partir del año 2030, este incentivo desaparecerá.
Fuente: Parlamento Europeo