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Fernando Alonso y su relación con su familia: «Soy muy competitivo, ellos no»

El piloto con más Grandes Premios disputados en la historia de la Fórmula 1 comenzó su trayectoria con una advertencia de su padre que le ayudó a relativizar las cosas. Fernando Alonso cuenta cómo su familia ha influido en su carrera y vida personal.

Fernando Alonso y su relación con su familia: «Soy muy competitivo, ellos no»
Fernando Alonso se sincera sobre su familia y el modo en que viven su éxito.

8 min. lectura

Publicado: 21/08/2023 19:50

Fernando Alonso ha sido casi siempre un piloto hermético y poco dado a mostrar nada más que lo estrictamente necesario en lo personal. Sin embargo, en los últimos años esta obsesión por mantener la privacidad a nivel humano se ha relajado y ha propiciado que el asturiano se abra un poco más.

Un buen ejemplo de ello es la entrevista recientemente concedida al podcast High Performance, en la que se ha profundizado mucho más en el aspecto humano y personal de Fernando Alonso que en el estrictamente deportivo o técnico relacionado con su presencia en la Fórmula 1.

«Son muy honestos con cosas que tú puedas pensar, comentarios que haces o cosas que para ellos no son tan importantes»

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La familia de Fernando Alonso

Uno de los temas estrella de la entrevista ha sido la familia de Fernando Alonso, que tan importante fue en sus inicios y que permite a la estrella mundial que es el asturiano mantener el contacto con la realidad de manera permanente.

Pero una de las cosas más curiosas es que el ahora piloto de Aston Martin, reconocido como uno de los pilotos más ambiciosos, no ha heredado ese rasgo de su personalidad de sus padres.

«Es algo que he hablado con mi familia en muchas ocasiones porque ellos no son competitivos en absoluto, así que no sé por qué yo lo soy tanto. Todavía recuerdan cuando jugando en casa yo era muy competitivo y me molestaba mucho con ellos», comienza contando Fernando Alonso.

«No hablaba con ellos durante un día entero cuando perdía y ellos nunca entendieron por qué yo era así. Nadie en la familia tenía ese enfoque, así que sigue siendo algo desconocido», admite entre risas.

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A lo largo de su trayectoria deportiva, los padres de Fernando Alonso se ha mantenido siempre en un segundo o tercer plano, evitando interferir en el desarrollo profesional y deportivo de su hijo.

«Probablemente el primer y único consejo que siempre me dio mi familia fue mantenerme humilde y aprovechar todas las ventajas que esta vida nos puede brindar. Económicamente, el estatus que nos brinda la Fórmula 1», recuerda el piloto español, que agradece poder volver a la normalidad cuando visita a su familia en Asturias.

«De vez en cuando vuelto a España y paso una semana con mi familia. Y esa semana es una especie de reinicio de las últimas semanas, que fueron una vida irreal y una burbuja. Volvemos a la base, vamos al supermercado, vemos a los amigos, simplemente charlamos, jugamos a las cartas, lo que sea. Esa es la vida que viviré los próximos 40 o 50 años y también es la vida que quiero vivir».

La familia, un recordatorio de las cosas importantes

Es también en esos momentos cuando Fernando Alonso puede contar con personas que le digan las cosas tal como son y le permitan relativizar los problemas o los inconvenientes derivados de su profesión, su fama o su relevancia.

«Son muy honestos con cosas que tú puedas pensar o comentarios que haces o cosas que para ellos no son tan importantes. A veces recuerdo que tuvieron que lidiar con mucha atención de los medios, incluso en la puerta de su casa», cuenta Fernando Alonso.

Entrevista concedida por Fernando Alonso al podcast 'High Performance'.

«Cosas que a mí me estresan porque no quiero que se molesten por esas cosas, pero de vez en cuando me dicen: “Oye, no es un problema”. Si están haciendo una foto es su vida, es su trabajo».

«Y tal vez a veces no lo veo de esa manera porque es como si estuvieran robando nuestra privacidad y nuestro tiempo en familia. Pero también entiendo lo que dicen porque es como, “vale, esto es la vida, Fernando, cálmate, no puedes cambiar el mundo, no puedes conseguir justicia en todo lo que ves en nuestros días”», reflexiona.

El consejo de José Luis Alonso a su hijo en Australia 2001

Durante la larga charla también ha habido tiempo para alguna anécdota. Como la conversación que Fernando Alonso tuvo con su padre José Luis durante la mañana previa al Gran Premio de Australia de 2001, el día que debutó en la Fórmula 1 con Minardi.

El joven de 19 años charlaba con su padre sobre la estrategia de carrera, pero este le quitó importancia y prefirió poner en perspectiva la situación para que su hijo tomara conciencia de la realidad.

«Trata de disfrutarlo porque tal vez sea tu última carrera», comenzó diciendo José Luis, a lo que Fernando preguntó confundido a qué se refería. «Nunca se sabe, esta es tu primera carrera, tal vez no rindas o no seas lo suficientemente rápido, o el equipo no esté contento contigo al final de la carrera o lo que sea».

Fernando Alonso, el día de su debut con Minardi en Australia 2001.

«Luego siempre podrás decir que corriste un Gran Premio de Fórmula 1», insistió. «Ya sabes, eres un piloto de Gran Premio».

Fernando Alonso recuerda aquel suceso como un ejemplo perfecto del tipo de «enfoque que tiene mi familia, que a veces para mí es muy valioso y muy útil cuando tengo estrés. Para ellos, todo es simplemente un regalo, un extra, y eso está muy bien».

«No son tan competitivos y a menudo están contentos con cualquier resultado de una carrera o en mi vida o cualquier problema que tenga», prosigue. «Suelen ser un buen equilibrio para mí porque siento que para ellos es menos importante. Así que, cuando me estreso por una pequeña cosa sobre la carrera, o por perder dos puntos porque cometimos un error o pasó algo, veo de ellos que sigue siendo bueno».

Lo cierto es que el tiempo ha demostrado que el temor de José Luis era claramente infundado, pues Fernando Alonso es ahora el piloto con más Grandes Premios de Fórmula 1 disputados en la historia de la categoría: 368. Aunque en realidad es muy probable que tuviera más confianza que nadie en su hijo y sólo pretendiera que este mantuviera la mente centrada en lo realmente importante.

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