No es solo el coche eléctrico: cuatro cambios que Europa no vio venir en el automóvil
El desarrollo de los coches en la actualidad y para el futuro más cercano está marcado por cuatro tendencias principales. Cuatro pilares que nos demuestran el adelanto que llevan las marcas chinas frente a las occidentales.

La industria del automóvil en Europa vive un momento de inflexión importante. El problema es que nadie tiene ni idea si esta saldrá beneficiada o perjudicada. Las decisiones que la Comisión Europea anuncie el próximo 10 de diciembre pueden marcar el devenir de todo el sector.
Hay varias verdades absolutas de las que la industria no se puede escapar: el coche eléctrico es el futuro, las marcas chinas han llegado para quedarse y los modelos de movilidad están cambiando a un ritmo de vértigo. Analizamos los cuatro pilares sobre los que se asentará el coche del futuro y que ya estamos empezando a ver en la actualidad.

Ya no se puede entender el automóvil sin estas cuatro verdades
El que era CEO de Lynk & Co hasta el pasado año 2024, Alain Visser, ha realizado una radiografía general de la industria automovilística. Bajo su mandato, la marca sueco-china intentó cambiar la forma que teníamos de entender el automóvil, apostando por un modelo de suscripción y no de propiedad.
Sin embargo, la guerra de precios iniciada por Tesla y BYD provocó que la compañía empezase a priorizar otros proyectos que dieran mayor rentabilidad. A pesar de este cambio y de salir de la marca, Visser sigue creyendo que la verdadera movilidad del futuro va «más allá de la industria automotriz».

Y pone sobre la mesa cuatro fundamentos, o cuatro desarrollos, que están golpeando con fuerza el sector y que van a marcar el devenir de los coches del futuro:
- En primer lugar, la electromovilidad: lo estamos viendo a cada día que pasa, llegan nuevos coches eléctricos, híbridos e híbridos enchufable. Eso sí, Visser cree que las marcas en realidad están adoptando esta filosofía de electrificación por las presiones políticas, ya que estos vehículos resultan menos rentables y requieren menos mantenimiento. Pero es una realidad inapelable que el coche eléctrico es el devenir del sector.
- En segundo lugar, lo que ya mencionamos: la creciente competencia de China. A pesar de los aranceles adicionales a la entrada de sus coches eléctricos, las marcas del gigante asiático siguen llegando a espuertas a Europa, creciendo su cuota de mercado con cada mes que pasa. Según el ex CEO de Lynk & Co, estas marcas trabajan con una disciplina y motivación que «hemos perdido en Europa», y apunta a Xiaomi como una de las precursoras de una «segunda oleada» en los próximos años.
- En tercer lugar, algo de lo que se habla poco pero de lo que las marcas chinas han sabido ver con antelación: el software. Este factor se está convirtiendo ya en un elemento diferenciador clave. El mejor ejemplo es Huawei, del que no verás ningún modelo con su logotipo, pero sí muchos con su software. Europa, en cambio, sigue siendo un tradicional fabricante de coches, sin más, aunque poco a poco eso también está cambiando.
- Y en cuarto lugar, el cambio en los hábitos de los conductores y los compradores. La gente hoy en día ya no busca un coche, sino movilidad. Visser afirma que el comportamiento de los coches ya no importa casi al 99 por ciento de los clientes. Y es algo de lo que se viene alertando durante años: tener un coche en propiedad ya no es una prioridad. «La experiencia por encima de la propiedad». En cambio, Europa sigue pensando como antes: «La industria automotriz no quiere crear una nueva forma de movilidad, sino solo seguir vendiendo coches».
Respecto a esto último, el ex mandatario de la marca china recuerda que las previsiones de cara al 2050 es que el 80 por ciento de la población viva en las ciudades, lo que cambiará por completo las necesidades de tener un coche en propiedad. La gente buscará acceso a la movilidad, utilizará una aplicación para moverse… «y la propiedad perderá su importancia».
Fuente: Turi.one

